100 años de Luis Martín-Santos, novelista, psiquiatra y antifranquista
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La Biblioteca Nacional de España (BNE) acoge la exposición ‘Luis Martín-Santos. Tiempo de libertad’ en honor al reconocido escritor, del que se cumplen 100 años de su nacimiento. Considerada una de las mejores novelas españolas del siglo XX, ‘Tiempo de silencio’ catapultó a la fama al escritor y psiquiatra vasco que, lamentablemente, falleció en Vitoria en 1964, dos años después de su publicación, a la temprana edad de 40 años. La muestra reúne unas 110 piezas, algunas inéditas, mediante las que se relata su trayectoria, sus referentes, sus contribuciones a la psiquiatría y su compromiso antifranquista.
Julià Guillamon, comisario de la exposición, introduce al personaje diciendo que “fue un escritor muy singular e influyente gracias a su obra cumbre en la que se aúnan modernidad estética, elementos críticos y capacidad combinatoria”. A través de Tiempo de silencio, la BNE ha preparado un recorrido en el que no se escapan las facetas menos conocidas del eminente novelista. Por ejemplo, fue el director más joven de un sanatorio psiquiátrico de España, tuvo una relación muy cercana con la cultura vasca, dada su ligazón con la Academia Errante o el Grupo Gaur, y su lucha contra el régimen de Franco le llevó a estar detenido varias veces.
En este sentido, el presidente de Acción Cultural Española (entidad colaboradora de la exposición), José Andrés Torres, afirma: “Martín-Santos escribía para mejorar España. Para despertar conciencias y mover voluntades. Y que ese compromiso político era el de un socialista militante del PSOE. Martín-Santos era antifranquista, por socialista”.
Por otra parte, la muestra se inicia en 1962 con la publicación de la mencionada obra. La novela tuvo un impacto sensacional en los ambientes culturales españoles, con una repercusión inmediata en el extranjero, traducciones al francés y al italiano, críticas muy favorables e incluso una aparición en prime time en la televisión francesa, recuerdan desde la BNE.
Entre lo que el visitante podrá disfrutar se encuentran fotografías y objetos personales, textos inéditos, poemas escritos a máquina, postales del joven residente en el extranjero, la orla colegial, los pulcros apuntes del aplicado estudiante de Medicina, los dibujos de anatomía de un cuaderno de estudios y hasta el examen realizado para optar al Premio Extraordinario de Licenciatura en la Universidad de Salamanca; muchos de ellos cedidos por los hijos del célebre escritor, Rocío y Luis.
La exhibición ofrece un acercamiento a la obra de Martín-Santos desde varios puntos de vista. Como explica el mismo Guillamon, se aprecia la parte biográfica en la cual se pasa revista a sus orígenes familiares, su trayectoria como joven universitario brillante y sus relaciones con el mundo cultural de Madrid y San Sebastián. “Las exposiciones literarias tienen la obligación de mostrar que el mundo de un escritor no se acaba en su experiencia biográfica”, apunta.
Por ello, pasado casi el ecuador de la muestra, el lenguaje de la misma cambia. “Hemos decidido desplegar visualmente la obra de Tiempo de silencio a través de imágenes del fotógrafo madrileño Santos Yubero, de los años 50, que conectan muy bien con el mundo del escritor”, comenta el comisario. En este punto, la combinación de elementos fotográficos, objetos y textos de la magna obra está servida.
Una de las intervenciones que más llama la atención es la lectura que el dibujante El Roto ha elaborado de Tiempo de silencio. “No se trata de una lectura al pie de la letra, sino una recreación e interpretación condensada en una colección de dibujos, 21 en total, de una claridad extraordinaria”, explica Guillamon.
Para acercar al público a Tiempo de destrucción –publicada por primera vez póstumamente en 1975 y recientemente recuperada– se han escogido cuatro imágenes y objetos simbólicos, que transmiten la fuerza transformadora de la novela y el viaje de su protagonista, han explicado desde la BNE. Esta parte la cierra la lectura de uno de sus fragmentos por parte de la actriz Lidia Otón.
Así las cosas, en el recorrido se despliegan visualmente sus novelas Tiempo de silencio y Tiempo de destrucción, hasta llegar al Tiempo de libertad (novela que debía cerrar la trilogía) y lema que da título a este recorrido por la obra de un autor excepcional.
Preguntado Guillamon por la faceta de Martín-Santos de opositor al régimen franquista, el experto responde: “Su militancia influyó mucho en la enorme repercusión de la novela Tiempo de silencio en el extranjero, aunque la obra se vale por sí misma. Es una novela de crítica social muy importante, no solo de la dictadura, sino de la sociedad española de la época”. A nivel personal, añade, Martín-Santos sufrió detenciones, problemas en su carrera académica y diferentes represalias dada su condición de socialista.
A modo de epílogo se presenta Tiempo de Libertad: la posteridad de Martín-Santos y su vigencia en el debate cultural actual. Ahí toman parte las interpretaciones de sus libros, los estudios sobre su obra, las publicaciones sobre su figura hoy, junto a nuevas traducciones en China y en Estados Unidos y el gran proyecto de Obras Completas, que recuperará muchos de los relatos, ensayos y obras de teatro inéditas que la familia ha rescatado en los últimos años, tal y como señala la misma BNE.
El hecho de que la muestra respire un aire cinematográfico no es casualidad. Guillamon supo desde el principio que la técnica del flashback podía ser la adecuada para dar a conocer la vida y obra del personaje literario ahora homenajeado. Su muerte por un accidente de coche impactó en el mundo cultural del momento, aunque sí se produjo más tarde cierto olvido. “Hubo algunos años de ostracismo”, concluye el comisario, “pero eso siempre pasa cuando hay una figura de ese calibre que desaparece. Hay que tener en cuenta que era el autor de un libro, muy prometedor, pero sin la dimensión que tuvo posteriormente”.
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