‘1997: Rescate en Nueva York’ en Filmin

rescate-nueva-york

Luis Roca continúa con ‘1997: Rescate en Nueva York’, de John Carpenter, esta sección con pastillas críticas de títulos vistos en el principal portal de cine en español, Filmin. Con un arsenal de más de 5.000 títulos, esta plataforma tiene su base en el cine independiente que triunfa en festivales. Filmin es tabla de salvación para amantes del buen cine, con visionados con calidad y de forma legal en múltiples soportes. Esta circunstancia se convierte en imprescindible para quienes viven fuera de Madrid o Barcelona, donde el parque de salas en versión original es prácticamente nulo.

Lleno eres de filmin

1997: Rescate en Nueva York (John Carpenter, 1981)

En 1997, Manhattan es una gigantesca cárcel rodeada de muros inexpugnables. Los reos entran y nunca más salen, sobreviven como pueden en el interior de la ciudad devastada. La oscurísima Nueva York tiene un capo de raza negra que responde al nombre de El Duque y se ha hecho con un prisionero de excepción, el mismísimo presidente de Estados Unidos, reo entre los reos. Snake Plissken, héroe de guerra caído en desgracia, hoy ladrón de bancos, deberá rescatarlo en menos de 24 horas si quiere sobrevivir.

En la Nueva York futurista de Carpenter hay entre las ratas “chalados”, que son los dueños del subsuelo. Hay teatros en ruinas con decadentes representaciones y el petróleo se consigue con perforadoras plantadas en los propios pisos. Esta NY está presidida por, ay, dos gigantescos edificios gemelos en una de cuyas azoteas aterrizará el salvador. Interesantísimo ver lugares emblema como el puente de Queensboro, el propio World Trade Center, Broadway, la Estación Central y la Biblioteca Nacional, transformados por los efectos de la más pura degeneración. El trabajo de dirección de arte de Joe Alves raya a gran altura.

La fábula futurista del mago John Carpenter se realizó en 1981, un año antes de que E.T. El extraterrestre echara a perder con su estúpida bonhomía a toda una generación de futuros cineastas. El mundo previsto por Carpenter imaginaba que en 1997 seguiría existiendo la URSS y que la otra gran potencia sería China. Otros se llenarían la boca con optimismo y sensiblería. No parece el juego de Carpenter. Él retrata un capitalismo negro como el betún, y su cine a mitad de tabla clasificatoria asciende peldaños con el tiempo, que le va dando la razón.  A mí me recuerda en España al maldito Jess Franco.

Siempre se agradecen personajes en el límite como el del paria Plissken, cowboy de moral inexpugnable. Magníficamente interpretado por Kurt Russel, el desconfiado Plissken parece no querer trato ni con su asistente de rodaje. El tono de western crepuscular está reforzado por la presencia de dos actores emblema, Lee van Cleef como el calvorota alcaide Hauk, y el mágico Ernest Borgnine como el taxista Cabbie. Impagables Isaac Hayes en el papel de El Duque,  Harry Dean Stanton como el traidor Brain y Donald Pleasance como el presidente gordinflón. Nunca un presidente de Estados Unidos apareció retratado de forma tan patética como aquí.

Este cine de acción y ciencia ficción de Carpenter es político. ¿Hay alguno que no lo sea? Es significativo que el año de estreno de 1997: rescate en Nueva York fuera el mismo en que Ronald Reagan iniciara su mandato como 40 presidente de Estados Unidos. La negritud de aquel mandato según Carpenter se extendió hasta 1989 y fue continuada por su vicepresidente, Bush padre. Puede también reflexionarse sobre que el argumento del filme, como Carpenter ha reconocido, tuvo como inspiración el escándalo del Watergate. Si aquello ocurrido en 1972 provocó la dimisión del presidente de la nación más poderosa del mundo, qué describiría hoy el director nacido en 1948 tras los sucesivos escándalos que no provocan siquiera declaraciones públicas de perdón. No digamos en España. Sean soldados o rehenes del capital desde los centros de poder político, estos poco honorables gobernantes se comportan hoy cuando se les señala como una banda de delincuentes comunes, negando la mayor, esquivando a la justicia, llevándola hasta el límite. ¿Qué aventura de Snake Plissken escribiría hoy John Carpenter?

Deja tu comentario

¿Qué hacemos con tus datos?

En elasombrario.com le pedimos su nombre y correo electrónico (no publicamos el correo electrónico) para identificarlo entre el resto de las personas que comentan en el blog.

No hay comentarios

Te pedimos tu nombre y email para poder enviarte nuestro newsletter o boletín de noticias y novedades de manera personalizada.

Solo usamos tu email para enviarte el newsletter y lo hacemos mediante MailChimp.