El fiscal que ha puesto de moda aquel enérgico Nueva York de los 80
Steven Siegel, fiscal en Nueva Jersey, lleva más de 30 años fotografiando la Gran Manzana. Comparte sus fotos en Flickr, plataforma que le ha servido para convertir muchas de sus fotos en virales, especialmente las que retratan aquel Nueva York de los ochenta en el que los especuladores de Wall Street aún no habían llegado a barrios como Williamsburg, y zonas de la Gran Manzana como Chelsea aún no se había ‘disneylizado’.
Por NATALIA L. PEVIDA
En La hoguera de las Vanidades, Tom Wolfe narra la historia de Sherman McCoy, un Rey Midas de Wall Street que, tras recoger a su amante en el aeropuerto JF Kennedy en su cabrio rojo, acaba por error en una calle del Bronx y atropella mortalmente a un chico negro, considerado la promesa de su comunidad. Los pasajes de esta ficción creada por el padre del Nuevo Periodismo aparecen de manera espectral en las perturbadoras y apocalípticas instantáneas que Steven Siegel comparte en Flickr. “Cuando la gente joven observa mis fotos de Nueva York en los 80, se quedan impactados, les resulta totalmente desconocida. Pero algunos de los menos jóvenes sí reconocen la ciudad y añoran los buenos viejos tiempos de autenticidad y diversión. A otros, por el contrario, les parece rememorar una pesadilla: la alta tasa de crímenes, la tensión racial, el paso devastador del VIH, el auge del crack… ”.
Siegel, fiscal en Nueva Jersey, empezó a inmortalizar calles del Bronx, Brooklyn, Manhattan, Queens y Staten Island cuando estudiaba Derecho en la Universidad de Columbia, hace más de tres décadas. Desde entonces, sigue retratando escenas urbanas, siempre en analógico; aunque lejos de ser un ferviente seguidor de la corriente Film is Not Dead, cuenta a El Asombrario: “Hoy el nivel de las cámaras y las posibilidades que ofrecen programas como Photoshop han conseguido igualar en calidad los resultados de la fotografía química y digital. Yo sigo en el analógico porque es el estándar al que estoy acostumbrado”.
La transformación de la metrópoli es el tema principal del archivo del fiscal. Una evolución hacia un antagonismo determinado en el antes y el después del 11-S. Uno de los principales estandartes de esa transformación urbana lo constituye Times Square, otrora repleta de salas de recreativos, cines X, cabinas de peep-shows y sitios raros y que en los últimos tiempos se ha disneylizado, acabando con los alquileres baratos y los pequeños comercios locales. Esta tendencia se ha extendido en las últimas décadas a zonas como Chelsea o la calle Bowery, antaño catalizadores contraculturales, y en la actualidad lugar de residencia de fortunas vinculadas a la especulación en Deuda Pública de Brasil, Rusia, India y China, según informa periódicamente la sección de Real Estate del Wall Street Journal. Ya ni Harlem escapa a este fenómeno, con cada vez más restaurantes recomendados en New York Magazine. Y es que, con tanta gentrificación, hasta el metro cuadrado de los cementerios se ha puesto por las nubes.
Sobre si esto supone una evolución a mejor o peor, el fiscal Siegel declara: “Aumentar los niveles de seguridad de una ciudad implica un precio que, hasta cierto punto, reside en la pérdida de libertad en lo referente a apertura cultural. La década de los 80 en Nueva York significó muchas cosas, pero también supuso un alto coste social y de vidas humanas. Mis fotos del sur del Bronx y Bushwick pretenden dar testimonio de esa realidad. Quienes se muestran nostálgicos del riesgo y la crispación de aquellos tiempos son los que no pasaron su infancia y adolescencia en la década de los ochenta en una vivienda del sur del Bronx y Bushwick”.
Los trenes suburbanos son otro de los temas recurrentes en la fotografía de Steven Siegel. Sus imágenes casi dan la razón a David Lynch cuando cuenta sus temporadas en la casa de sus abuelos en Williamsburg, mucho antes de que los tiburones de Wall Street se zambulleran sobre East River y echaran el diente a esta zona industrial, convirtiéndola en meca del hipsterismo radical. “Bajar las escaleras del metro era como descender al infierno. Sentía pánico en aquellas estaciones; el viento que provocaba el paso de los trenes, el estruendo, el olor de los vagones…”. (David Lynch: Beautiful Dark, Greg Olson, 2011).
Steven Siegel dice que para captar Nueva York uno debe olvidar la idea general de metrópoli gigantesca y totalizadora, y “pensar en los cinco distritos, y en los cientos de barrios que conforman cada uno de esos distritos”. Define su relación con la fotografía como “visceral, una necesidad para acercarme al presente, el aquí y el ahora, al que estamos ciegos, ya que ocupamos demasiado tiempo rememorando hechos pasados o anticipándonos al futuro”. Y asegura que, después de llevar más de 30 años recorriendo palmo a palmo la Gran Manzana, «todavía descubro rincones y lugares extraordinarios para capturar”.
Comentarios
Por Fernando, el 01 agosto 2015
Estupendo artículo por resaltar un magnífico trabajo de Steven Siegel. De todas formas echo en falta recordar el entorno de aquellos años: Regan-Bush, Wall Street, la irrupción de las drogas por parte de agencias del Gobierno para sufragar guerras clandestinas (contra-nicaragüense)etc. Gracias.
Por Instante decisivo, el 03 agosto 2015
Excelente artículo lo que Fernando echa en falta lo dicen dicen directamente las fotos de Steven Siegel. No se necesita aporte documental. Es ni más ni menos que Fotografía, que como una de las Bellas Artes habla por si misma.
Por Glow Photo, el 03 agosto 2015
Celebramos el artículo de Natalia L. Pevida. Reune una visión cosmopolita de la cultura y un conocimiento no menor del arte fotográfico.Enhorabuena Asombrario