Celebramos los 200 años de Thoreau, padre del ecologismo y la desobediencia, en 20 sabias ideas
En ‘El Asombrario’ no podíamos dejar de celebrar los 200 años del nacimiento del norteamericano Henry David Thoreau, que se cumplen hoy, 12 de julio. A través de sus ensayos y diarios, y a través de su vida -fue muy coherente y llegó a retirarse dos años a una cabaña perdida en el bosque que se construyó él mismo-, se le puede considerar pionero de la ecología, la ética ambientalista y la desobediencia civil. Estaba tan completamente convencido de la bondad de la naturaleza como para proclamar «un pensamiento salvaje«. Hoy le recordamos a través de 20 de sus pensamientos extraídos del libro recopilatorio de sus ideas, ‘Todo lo bueno es libre y salvaje’, recientemente publicado por Errata Naturae, editorial que también ha sacado su obra más conocida, ‘Walden’, y ‘Cartas a un buscador de sí mismo’ y ‘Musketaquid’. Disfrutad de este tarro de esencia de sabiduría, de plena modernidad aunque cuenta con dos siglos de maceración.
1) «Los hombres y los jóvenes aprenden todo tipo de oficios, pero no cómo convertirse en hombres. Aprenden a levantar casas, pero no están bien alojados, no son felices en sus casas, como lo es una marmota en su hoyo. ¿De qué sirve una casa si no dispones de un planeta decente donde levantarla, si no soportas el planeta en el que está?». (Cartas a un buscador de sí mismo, 1860).
2) «¿Cuáles son los elementos naturales que hacen que una comarca sea hermosa? Un río, con sus cascadas y sus praderas, un lago, una colina, una peña o rocas sueltas, un bosque y viejos árboles en pie. Esas cosas son bellas; tienen un uso elevado que los dólares y centavos no representan jamás. Si los habitantes de una ciudad fueran sabios, tratarían de conservar esas cosas, aunque fuera a un coste considerable; porque tales cosas enseñan mucho más que cualquier predicador o profesor que se contrate o que cualquier sistema educativo reconocido en la actualidad». (Diarios, 1861).
3) «La mañana llega cuando estoy despierto y hay en mí un amanecer». (Walden, 1854).
4) «Ver salir o ponerse el sol cada día debería mantenernos cuerdos para siempre, al ponernos en relación, por nuestra buena salud mental y física, con un hecho universal». (Diarios, 1852).
5) «A algunos hombres les entusiasma el olor de la pólvora ardiendo, pero yo anoche soñé cuánto más sensato sería entusiasmarse por el olor del pan recién hecho». (Diarios, 1851).
6) «Independientemente de mis propias costumbres, estoy convencido de que dejar de comer animales es parte del destino de la raza humana y de su mejora progresiva, al igual que las tribus salvajes abandonaron la mutua antropofagia cuando entraron en contacto con otras más civilizadas» (Walden, 1854).
7) «Un hombre puede considerarse afortunado cuando la que es su comida es también su medicina». (Musketaquid, 1849).
8) «El silencio es la conversación de un alma consciente consigo misma». (Diarios, 1838).
9) «El monstruo nunca se encuentra allí donde creemos que está. Lo realmente monstruoso es nuestra cobardía y nuestra indolencia». (Cartas a un buscador de sí mismo, 1854).
10) «¡Sea valiente! Es lo más importante». (Cartas a un buscador de sí mismo, 1854).
11) «Un hombre es rico en relación con el número de cosas de las que puede prescindir». (Walden, 1854).
12) «¡Simplicidad, simplicidad, simplicidad! Que vuestros asuntos sean dos o tres, y no cien o mil; y en lugar de un millón, contad media docena y llevad las cuentas con la uña del pulgar. En medio de este mar picado de la vida civilizada, son tales las nubes, las tormentas, las arenas movedizas y los otros mil asuntos que debe uno enfrentar, que (…) Simplificad, simplificad». (Walden, 1854).
13) «No estoy solo si estoy conmigo mismo». (Musketaquid, 1849).
14) «Tengo mucha compañía en mi casa, sobre todo por la mañana, cuando nadie me visita. (…) No estoy más solo que un sencillo gordolobo, o un diente de león, o una hoja de judía, o una acedera, o un tábano, o un abejorro. No estoy más solo que el Mill Brook, o que una veleta, o la Estrella Polar, o el viento solano, o un aguacero en abril, o el deshielo de enero, o la primera araña en una casa nueva». (Walden, 1854).
15) «Contened el ritmo. Seguid las horas del universo, no las de los trenes». (Diarios, 1852).
16) «Nada es tan bello como las copas de los árboles». (Diarios, 1851)
17) «Creo que si no pasara al menos cuatro horas al día -aunque por lo general son más- deambulando por los bosques, las colinas y los campos, absolutamente libre de toda atadura mundana, no podría conservar ni la salud ni el ánimo». (Caminar, 1861).
18) «Debo caminar más con los sentidos libres». (Diarios, 1852)
19) «Nada puede resultarle más útil a un hombre que la determinación de no ir apresurado». (Diarios, 1842).
20) «Amo lo salvaje tanto como el bien». «En una sola frase: todo lo bueno es libre y salvaje». (Walden, 1854. Caminar, 1861).
SIGNUS, COMPROMETIDA CON EL MEDIO AMBIENTE, HACE SOSTENIBLE ‘EL ASOMBRARIO’.
Comentarios
Por Mentalmente, el 13 julio 2017
Henry David Thoureau bebió de las ideas de la India, y el proceso filosofico le llevó casualmente a que sus ideas, nacidas de esa influencia, regresaran a la India de nuevo, siendo en este regreso, cruciales para la liberación del pueblo indio.
Ahí nació el nacionalismo político que existe hoy en día.
Por Francisco, el 14 julio 2017
Pues no veo yo ninguna similitud entre la desobediencia y el nacionalismo que se basa en la obediencia al superior y a la patria.
Por Carlos Salazar, el 17 julio 2017
Thoreau, luminaria eterna.
Por Carlos Salazar, el 17 julio 2017
Thoreau, simplemente visionario eterno.
Por GLORIA BELTRAN, el 06 julio 2021
quiero profundizar en sus escritos.