Festival de Cans: el ‘agroglamour’ del Cannes gallego
Entre campos de labranza, gallineros, hórreos y cuadras de cerdos tiene lugar el Festival de Cans, una cita de cortometrajes gallegos que empezó como una broma y ya celebra su 15ª edición. Cine, música y gastronomía para poner en el mapa la creatividad gallega. Todo un pueblo abre sus casas para las proyecciones ofreciendo esta peculiar identidad al evento que se desarrolla esta semana, hasta el sábado. No tiene el glamour del Festival de Cannes francés, pero lo suplen con ‘agroglamour’, diversión y autenticidad.
Un festival que nace como una broma por el juego fonético entre Cans y Cannes. Resulta que Cans es una pequeña parroquia gallega perteneciente a O Porriño, situada en la comarca del Valle de la Louriña, cerca de Vigo. Tiene unos 450 habitantes. Pleno campo y entorno rural. Y ‘cans’ significa ‘perros’ en gallego. Así que este festival tiene doble guasa.
“El festival toma forma a partir del juego de palabras entre nuestro Cans y el Cannes francés. Lo que nació casi como un juego y una broma para acercar la cultura al mundo rural se ha convertido en un festival muy serio organizativamente, pero sin perder ese fondo gamberro que ha estado en su esencia desde el principio”, explica Alfonso Pato, director del festival.
Cans se celebra cada año en mayo, intentando coincidir con sus primos de Cannes en Francia. En el año 2004 asistieron 500 personas en una tarde de sábado y desde entonces empezaron a acoger visitantes sin parar. Ya están por encima de los 13.000 espectadores, que acuden al festival de cortometrajes de producción gallega, donde la música también es importante.
Más allá del cine y del nombre, poco tiene que ver con el festival francés. “Aquí, por no tener, no tenemos ni salas de cine, que son acondicionadas en casas de vecinos, cobertizos o bodegas, pero intentamos que tengan las mejores características técnicas posibles. Tampoco hay limousinas sino chimpines (tractores domésticos) y tienes más posibilidades de pisar tierra de cultivo que moqueta”. Para su director, “Cans posiblemente no sea el mejor festival del mundo, pero sí el festival más diferente del mundo. Todo lo que se van a encontrar aquí será diferente a lo que ven en cualquier otro festival. Cans transmite identidad, respeto al medio ambiente, compromiso con los valores de la igualdad a través de su decálogo de visibilidad de la mujer en el audiovisual, apoyo incondicional a las nuevas y nuevos creadores, participación intergeneracional en la organización desde niñas y niños de 8 años hasta personas de 90 años o la dinamización total de un entorno rural”. Frente a la sofisticación y el glamour de la Costa Azul, la cita gallega ofrece altas dosis de autenticidad y diversión en medio de los campos. Es lo que llaman “agroglamour”, la esencia del evento.
Durante el festival, la aldea se transforma completamente y los espacios privados como bodegas, galpones o bajos de las casas se convierten en salas de proyección gracias a las pantallas construidas por los carpinteros Silvino y Juan Maceira, y la hierba empacada y las tablas donde se sienta el público a ver las películas. Otros espacios, como placas de casas en construcción, gallineros, camiones o fincas se convierten en lugares para actuaciones musicales y actividades paralelas.
La oferta es amplia: cortos, estrenos de filmes, documentales, coloquios con cineastas, rutas sonoras y otras actividades, como las dirigidas al público infantil en la sección MiniCans, con talleres de cine, música, proyecciones, magia y hasta una degustación de galletas.
Cuenta Alfonso Pato que el festival ha crecido con una entidad propia, teniendo siempre como objetivo la potenciación de los nuevos creadores y creadoras de Galicia. “No renunciamos a que estén muchos grandes directores y directoras que llegan desde otras partes de España e incluso desde otros países del mundo, pero uno de los objetivos principales es poner en el mapa a los creadores y creadoras gallegos”. Por aquí han pasado también escritores de relevancia como Suso de Toro o Manuel Rivas y muchas personalidades del mundo del arte, del periodismo o de la arquitectura.
Uno de los iconos del festival es el perro de Cans (o can de Cans), que tiene estatua propia en el pueblo. “Es el logo y posiblemente uno de los iconos más reconocibles de Galicia en este momento. Es increíble la dimensión que ha tomado y la enorme demanda que genera. Las camisetas casi siempre se agotan, pero además hay tazas, llaveros, gorras, mochilas o pegatinas que durante todo el año las lleva la gente en eventos esparcidos por toda la geografía. El perro amarillo está asomado en los balcones de todas las casas de la aldea y da mucha alegría al festival”. El otro icono del evento es la Señora Alicia, todo un símbolo, como indica Alfonso. “Es la persona de mayor edad que colabora con el festival, acaba de cumplir 90 años, y siempre está en su balcón para saludarnos, darnos aliento, prestarnos su casa, su finca y su cobertizo. Nos ha dicho siempre que su casa es la nuestra y es emocionante su grado de implicación y el entusiasmo que muestra”.
El Festival de Cans, que se celebra entre los próximos 23 y 26 de mayo, contará en la apertura de esta edición con las proyecciones de British Winters, debut de Roque Cameselle en el ámbito de la imagen real, y A estación violenta, primer largo de Anxos Fazáns. Además, cineastas como Fernando Trueba y Gracia Querejeta participarán en los Coloquios en el Espacio Mahou de la Leira de Alicia. En esta ocasión, el Premio Pedigree 2018, su máximo galardón honorífico, será para la productora Chelo Loureiro, una mujer con un papel imprescindible en la construcción del audiovisual gallego en las últimas dos décadas. “Chelo Loureiro es una de nuestras productoras más reconocidas y más audaces, también una persona muy implicada socialmente en la lucha por el reconocimiento de las mujeres dentro del campo audiovisual”.
La cita cuenta este año con varias presencias internacionales a través de su sección ExtraCans. “Buscamos abrir una ventana para internacionalizar el festival y al mismo tiempo enriquecer la conexión entre cineastas de Galicia y otros que llegarán de países como Líbano, Brasil, Italia, Portugal o Gales. Al mismo tiempo, todos traerán obras de gran calidad que han estado en festivales como Locarno o Venecia. Todo partiendo de un criterio, como es rastrear el trabajo internacional que han hecho profesionales gallegos de la producción, la dirección de fotografía, etcétera, y visibilizarlo en nuestro festival, ya que en muchos casos no había sido visto en España”, apunta el director.
Además del cine, que consituye la parte central del festival, habrá actuaciones musicales: Burning, Depedro o Triángulo de Amor Bizarro. “Tendremos a Kevin Weatherill, histórico líder de los Immaculate Fools, inaugurando el nuevo espacio del Invernadero o a otros artistas como Esteban Y Manuel, Mounqup, Pardo, Magín Blanco o Tanxugueiras. También tendremos una parte gastronómica en colaboración con Mahou, que se denominará Tapas de cine, donde pasarán dos excelentes chefs como Lucía Freitas y Beni Couso, además de las comidas servidas por Kike Piñeiro”.
Hasta el festival tiene su himno propio, y este año la canción la cantan Magín Blanco y Uxía : Y se pondrá también el foco en los incendios forestales que cada año sufre Galicia con el fin de concienciar a través de piezas audiovisuales sobre la necesidad de proteger los montes y el territorio.
Afirma Alfonso Pato que este curioso y atractivo certamen atrapa. “Si vienes una vez, siempre quieres regresar algún día. Sobre todo, Cans transmite algo que hace mágico este festival: la emoción. Pero todo lo que os cuente no superará el venir aquí y vivirlo en primera persona”.
El Festival de Cans se celebra del 23 al 26 de mayo en Cans (Galicia).
Comentarios
Por C, el 24 mayo 2018
Que graben un documental y que se presenten en la seccion de docus o donde puedan meterla del Festiv d Cannes y a ver,,,
Aupa !
Por Santi Ochoa, el 24 mayo 2018
¿¿Festival de Cans??
Por xure, el 24 mayo 2018
sodes uns fenómenos