Cascadeur, el erótico y misterioso piloto musical
El cantante, compositor e intérprete francés Alexandre Longo, más conocido como Cascadeur, acaba de publicar un adelanto de su nuevo álbum Ghost Surfer. Desde el Asombrario & Co te adelantamos algunas de las claves para conocer al peculiar artista galo y lo que podremos encontrar en este asombroso disco que se publicará a finales de agosto.
EVA TOVAR
La elegancia de sus composiciones y su puesta escena son un combinado que convierten cada escucha de este artista en un ritual mágico que invita a parar el tiempo y dejarte llevar a parajes oníricos mientras escuchas sus bellas melodías. Abre bien las orejas y los ojos porque estás a punto de conocer -si todavía no le has echado el ojo- al misterioso Cascadeur (nombre en francés para designar a los especialistas de cine) un hombre que se erige en todo un especialista y hacedor de atmósferas de sutil belleza en cada uno de sus temas y siempre sin tenerle ni un ápice de miedo al riesgo. Poniendo voz y alma en cada composición bajo una apariencia enigmática que le hace más interesante si cabe.
Ante la inminente llegada de su nuevo y segundo disco y tras escuchar este adelanto, que cobra vida con las bellas imágenes del video clip, me adentro en un nuevo viaje sonoro al que os invito. Inevitablemente este nuevo tema de Cascadeur, Ghost Surfer me sugiere que de nuevo indagará en los espacios terrestres y estelares a través de sus creaciones musicales. Doy rienda a mi imaginación y comienzo un nuevo viaje iniciático y sonoro de uno de los artistas más enigmáticos llegados desde Francia y que más me han impresionado en los últimos años. Mi memoria musical abre la carpeta de viajes y recuerda una de mis muchas escapadas al sur de Francia. Fue allí donde en el caluroso agosto del 2008 descubría a este misterioso hombre de acariciante voz y manos sobre un piano.
Su habitual casco de piloto de caza con estrella roja en la cabeza, su rostro cubierto con una máscara de luchador mexicano donde se adivinan sus carnosos labios e incluso en ocasiones protegido por un albornoz de boxeador con su nombre escrito en la espalda, me devuelven a paisajes musicados. Podría parecer el principio de un sueño erótico en una tarde estival, pero no, es así como Cascadeur se divierte con el misterio creado para ocultar su verdadera identidad, la de Alexandre Longo y dejarse ver de esta guisa en cada uno de sus conciertos y apariciones públicas, invitándote a indagar y que quieras saber más del hombre que se oculta tras esa máscara. Debe ser algo muy francés esto, que se lo pregunten a Daft Punk.
Y así descubrí a Cascadeur que llegó demostrando su elegante capacidad de moverse lentamente por el escenario, como si de un samurái se tratase, sin hacer ruido, rodeado de teclados e instrumentos extraños, poniendo en pie una ceremonia donde cada gesto, estudiado al milímetro, cuenta para sorprender a la audiencia. vamos, que si escuchar sus discos en casa o en el coche es una delicia, asistir a sus actuaciones en directo resulta una experiencia extrasensorial.
Fue The Human Octopus su puesta de largo en la escena musical tras ganar en 2008 el premio QED que organizaba la revista musical francesa Les Inrockuptibles. Un álbum cargado de atmósferas en once sutiles melodías que dejan adivinar su vasta y amplia cultura musical y donde la emoción y la belleza se convierten en la materia prima de cada una de sus creaciones. Suenan las primeras notas y la curiosidad suscitada por el silencio da paso a la emoción, a la melancolía. Es así como se le percibe siempre al escucharle en cada uno de sus temas. Logra dotarlos de momentos irrepetibles cargados de magia gracias a una voz andrógina, rica en sonoridad y amplitud de registros, casi similar al contralto, y siempre al servicio de los textos líricos y poéticos que acompañan las composiciones y melodías que recuerdan en ciertos momentos al genial Eric Satie.
Así es él, sofisticado y elegante, así es como Cascadeur ha conseguido que Into the Wild o Walker sean piezas clave de su corta carrera y ya convertidas en imprescindibles para los amantes de la música hecha en el siglo XXI.
La historia de Cascadeur es la de un músico apasionado por el piano, su instrumento predilecto, que empezó a tocar a los 8 años marcado por la disciplinada formación de su padres, músicos ambos, pero sobre todo por la de su padre, de origen italiano y director de la Escuela de Bellas Artes de Metz. De esta manera su estricta educación musical pasa por la música clásica, óperas italianas y por supuesto la música contemporánea. El propio Alexandre Longo recuerda sus vacaciones dedicadas al desarrollo intelectual y musical. Podría haber sido futbolista, su otra gran pasión, pero sólo podía jugar cuando había acabado las clases de piano. Solo entonces podía intentar emular a su admirado Platini de la época en el Juventus.
Cuando sube al escenario observa al público que le espera y le músico se divierte como un niño. Su disfraz ayuda a que la carga emocional de sus composiciones melancólicas no sea demasiado grande, pero lo cierto es que estamos ansiosos por poder disfrutar de su nuevo trabajo Ghost Surfer al completo; mientras tanto nos conformaremos con directos de temas inéditos como éste, grabado en Metz, su localidad y que ensalzan la belleza en todo su esplendor .
Como siempre desde El Asombrario & Co apostamos por las nuevas semillas sonoras y nos atrevemos a pedir que nuestros vecinos franceses sean invitados más veces a participar en nuestros renombrados festivales y visitar nuestras salas y teatros. De momento y para amenizar la espera seguiremos asombrándonos y compartiendo sus músicas desde aquí.
Puedes seguir al artista en:
http://www.cascadeursound.com/
Twitter: @cascacadeursound
Comentarios
supeta
Por supeta, el 22 julio 2013
Algo ya mascado hasta la saciedad. Nada nuevo. Tópico y pretencioso. Mete a unos cuantos artistas franceses que tengo en mente en una coctelera y voila.