Autorretratos de Alberto García Álix, de subida y de bajada
Uno de los fotógrafos españoles con más personalidad y capacidad de impacto, Alberto García Álix, presenta en el Círculo de Bellas Artes de Madrid una serie de 72 autorretratos, entendidos en su concepto más amplio, como una mirada transversal a su vida. Hasta el final del verano, como cierre del exitoso PhotoEspaña2014.
“Tenía vergüenza, porque me parecía una sobreexposición. Al principio no quería hacer esta exposición, pero me convencieron y, al final, me ha dado muchas alegrías. Me cohibe verme en la paredes, pero es lo que hay”. Así opina Alberto García Alix (León, 1956) sobre Autorretrato, una muestra que incluye 72 de sus fotografías, además de su obra autobiográfica en vídeo De donde no se vuelve, abierta recientemente en el Círculo de Bellas Artes de Madrid como colofón al exuberante PhotoEspaña de este año y que podrá visitarse hasta finales del mes de septiembre.
Autorretrato no pretende ser un diario de García-Alix ni supone un ejercicio egocéntrico. El concepto de autorretrato es para él muy amplio, ya que abarca una gran parte de su obra en la que se considera reflejado. Es difícil encontrar en su trabajo alguna pieza que no sea intensamente autorreferencial y podría decirse incluso que toda su obra, en conjunto, forma un gran autorretrato. Es una mirada transversal a su vida. En las imágenes, no sólo aparece su cuerpo, sino también los espacios como elementos que tienen valor en sí mismos.
La muestra recorre su trayectoria, desde los primeros autorretratos realizados a finales de los años 70 hasta la actualidad. “En ella se perciben cambios a medida que transcurren los años. En 1986 trabajaba con 35 mm y realizaba ejercicios para aprender algo sobre la realidad. Después, toma más conciencia del hecho fotográfico y va cambiando su forma de tratar la imagen dándole unos tintes más líricos”, comenta el comisario de la exposición, Nicolás Combarro, buen conocedor de la casa García Álix, él también fotógrafo y artista, que desarrolla un interesante proyecto denominado Arquitectura y Resistencia. Y continúa analizando la evolución del fotógrafo leonés: “A partir del año 2000, va encerrándose en sí mismo, cierra el ángulo de la foto y dirige su mirada hacia su interior. A través de sus autorretratos se ve la evolución de su vida. La última etapa es de más abstracción. Los rostros que retrata son más difusos”.
Una de las fotografías refleja bien el concepto del conjunto; es la imagen de una escalera de una de sus casas. ¿Es una escalera de subida o de bajada? García Alix responde: «Cuando la hice era de subida; ahora es de bajada”.
‘Autorretrato’. Hasta el 28 de septiembre. Círculo de Bellas Artes. Alcalá, 42. Madrid. De martes a domingos: de 11.00 a 14.00 y de 17.00 a 21.00 h.
Comentarios
Por Esklopez, el 13 agosto 2014
Personalísima muestra que te arrastra a la intimidad del autor.