El limbo (fotográfico) del director Juan Carlos Fresnadillo
‘Baptism’, fotografía de Juan Carlos Fresnadillo.
‘Baptism’, fotografía de Juan Carlos Fresnadillo.
El espacio cultural TEA ,Tenerife Espacio de las Artes, exhibe hasta el 11 de septiembre la primera exposición de fotografías del cineasta Juan Carlos Fresnadillo, ‘Limbo’, comisariada por David Olivera. La muestra la componen 30 imágenes en blanco y negro, capturadas en 13 ciudades de cinco países (EE UU, Reino Unido, Argentina, Francia y España). El director de ’28 semanas después’ (2007) habla para ‘El Asombrario’ de fotografía y nos pone al día de su vida y proyectos en Los Ángeles (EEUU), donde reside. En la actualidad, Fresnadillo trabaja en la adaptación de la novela ‘Una vuelta de tuerca’, de Henry James, con producción de Steven Spielberg.
Juan Carlos Fresnadillo (Santa Cruz de Tenerife, 1967) reside en Los Ángeles desde 2013. Fue el primer cortometrajista español en ser nominado a los Oscar de Hollywood, por Esposados (1996). Con su primer largometraje, Intacto (2001), ganó el Goya a la Mejor Dirección Novel. 28 semanas después (2007), continuación de la celebrada 28 días después (Danny Boyle, 2002), fue la segunda película más taquillera en Estados Unidos el primer fin de semana que estuvo en cartelera. Intruders (2011), su último trabajo, inauguró el 59 Festival Internacional de Cine de San Sebastián.
“El interés por la fotografía siempre ha estado en mi vida y mi carrera”, explica a propósito de Limbo, “con ella se produce mi acercamiento más puro a la imagen. El primer intento de contar historias lo hago con 16 años con fotos a mis amigos en Tenerife. Eran imágenes con intencionalidad narrativa”. Night Hunter, Accident, Attack, Hide and Seek, Moonstrucks, Paris, Baptisme, Tourists, Mother and Son, Parade, Shadow, The Box, Just Here, Mermaids, London Bus, Revelation, Childhood´s End, Laguna Beach, Tribulations, Fall, Los pájaros. Títulos nada neutros, con gran relevancia. “Esos títulos justamente hacen ver mi vocación de narrador. Son propuestas narrativas al visitante para que él lleve la historia que sugiere al lugar que crea más conveniente”.
Le pregunto por cómo se gesta la exposición. “En 2012 me sentía dividido en tres: mi casa en Madrid, mi corazón en Buenos Aires y mi profesión en Los Ángeles. En medio de la soledad durante todos los viajes de esos años la cámara fue mi compañera. El título de Limbo se explica por eso, es mi limbo propio y también de personajes que están en transición. En el hecho de que mi fotografía sea callejera tiene también que ver con esos fotógrafos de los que mamé cuando era jovencito. Recuerdo la impresión que me produjo la primera exposición que vi de Cartier-Bresson”. Hay imágenes con ecos de estampas de fotógrafo clásico, y otras que reproducen miradas perdidas. Todas en blanco y negro para desnudar la realidad; “es mi forma de sacar lo más íntimo de ella”.
‘The Crow and the Squirrel’, fotografía de Juan Carlos Fresnadillo.
‘Tribulations’, de Juan Carlos Fresnadillo.
En armonía con su cine desde la expresionista Esposados, hay fotos sombrías que invitan a pensar en lo oscuro y terrible. “La familia está representada. Es uno de los temas de mi cine, no tanto como bendición, sino por lo turbulento que de ella también se deriva”. En muchas hay distancia e ironía y en otras gente que como el fotógrafo estaba en transición, física y emocionalmente. “Dos son un homenaje al cine, a Hitchcock y la noche americana, y en muchas está el espacio donde más a gusto me siento, la playa, un lugar que en cierta forma es como el limbo, está entre dos mundos, es un lugar metafórico donde se deja atrás la máscara urbana para adentrarse en la naturaleza”.
Vida y proyectos en Estados Unidos
Hace poco los medios anunciaron que Fresnadillo trabaja en la adaptación de la novela Una vuelta de tuerca, de Henry James. El proyecto “está en marcha, tengo la sensación de que será, por fin, mi cuarta película”. Produce el estudio Dreamworks de Steven Spielberg. “Es una gran responsabilidad. De la novela se han hecho grandes adaptaciones. Tengo cierta libertad y me siento cercano a la historia. Espero poder desarrollar un universo visual y narrativo potente. Los planes son empezar a rodar después del verano”.
Es a partir de Intruders (2011) cuando el cineasta tomó la decisión de mudarse a Estados Unidos. “En esa época me salí del proyecto El cuervo. Estuve entonces desarrollando un año Highlander, que trataba de hacer una nueva adaptación de Los inmortales. Hubo un desacuerdo creativo y a finales de 2012 también me salgo de ahí. En ese momento me doy cuenta de que no puedo trabajar con la industria estadounidense viviendo en España. En febrero de 2013 me instalo allá”.
Entre las cosas que el tinerfeño se ha propuesta en EE UU figura introducirse en la televisión por cable. “El camino es este: a) desarrollar un primer capítulo junto con un escritor; b) dirigirlo y que guste; y c) convertirte en productor ejecutivo de la serie”. En estos tres años, Fresnadillo ha realizado varios intentos. El más exitoso ha sido Falling Water, con el canal americano USA Network, cuya primera temporada será emitida a partir de octubre en EE UU. Está avalada por Gale Anne Hurd, productora de Walking Dead, y coescrita por Henry Bromell, creador de Homeland y Brotherhood. “Es un thriller metafísico sobre cómo los sueños terminan convirtiéndose en una respuesta emocional a una realidad fría y carente de emoción”.
‘Father and Daughter’, de Juan Carlos Fresnadillo.
El director canario Juan Carlos Fresnadillo junto a una de las imágenes de su exposición. Fotografía de Jaime Chinarro.
El cineasta confiesa no estar muy al tanto de lo que pasa en el ámbito de la política en España. “No me interesa, los políticos no me producen especial atracción, no termino de creerme a ninguno”. Sobre el cine, en cambio, sí opina. “Veo que se ha polarizado entre producciones populares e independientes, se ha eliminado la clase media. Claro que sigue habiendo creadores interesantes, pero la falta de interés por parte del público español por ver su cine es un problema. Percibo que fenómenos como Ocho apellidos vascos (Emilio Martínez Lázaro, 2014) o, más recientemente, Kiki, el amor se hace (Paco León, 2016) remiten a comedias españolas que lograban atraer al público, eso está bien, porque genera industria. Dentro de lo alternativo, mi impresión es que hay carencia de interés y producción, como si viviéramos un momento de estancamiento”.
Termino pidiéndole el nombre de un cineasta de referencia actual. “Mi favorito es Jonathan Glazer. Su Under the Skin (2013) es una obra muy evocadora, de una profundidad y una poesía apabullantes, valiente narrativamente y a contracorriente, me pegó un puñetazo creativo y existencial. Me viene a la cabeza también Denis Villeneuve, con Prisoners (2013) y Sicario (2015). Es otro director que me apetece seguir, especialmente ahora para saber qué hará con la anunciada secuela de Blade Runner (Ridley Scott, 1982)”.
Comentarios
Alex Mene
Por Alex Mene, el 25 agosto 2016
Interesante artículo. Estupendas fotografías.