‘Delicias Brut’ entre la marea ‘vintage’ del Rastro
MAD DESCUBRE
Un oasis de diseño de elegante modernidad y funcionalidad en medio de las antigüedades, cachivaches y objetos vintage del Rastro madrileño. A dúo. Los Brut. Con ellos estrenamos otro divertido formato: el 3 X 3.
«¡Vamos, que me las quitan de las manos! ¡Vamos, que me las quitan de las manos!».
Uno ha de apartar la ristra de ropa interior y las cortinas de toallas en pleno domingo madrileño. Estamos en El Rastro. De repente, entre puestos de gafas a 3 euros, antigüedades y objetos vintage: una sorpresa. Nos asombramos. Un espacio distinto. Con dibujos, lámparas, alfombras, mesas, sillas, jarrones, estanterías. Firmas importantes de diseño como la francesa Maison Martin Margiela, la finlandesa Ittala, las estanterías escandinavas String y los inconfundibles textiles de Eleanor Pritchard. Trabajos de artistas emergentes como Davis, Iñaki Chávarri, Job Sánchez, Alberto Acinas y María Latova. Y, sobre todo, mobiliario moderno y funcional con el sello Espacio Brut, creado por Braulio Rodríguez Martín y José Cámara. Sí, en medio del Rastro, un oasis de racional y elegante modernidad. «Empezamos en otoño de 2009. Aquí en El Rastro, pero ya veníamos trabajando en interiorismo y diseño de mobiliario con nuestra firma HOLZ57, desde 2004», repasa Braulio. «Nos atraía la idea de crear un espacio ecléctico donde mostrar nuestra obra y las de otras firmas muy seleccionadas, y a la vez exponer a artistas jóvenes, en medio de un hábitat tan distinto, como contrapunto a tanto vintage y tanta antigüedad. A veces nos cuesta hacérselo entender a la gente que entra. Algunos que no nos conocen salen corriendo. Pero la mayoría abre su mente y se acerca a lo que proponemos. Ese es nuestro reto: estimular la curiosidad, que se acostumbren a ver cosas diferentes».
«Yo estudié arquitectura y nuestras referencias son sobre todo el movimiento moderno y el racionalismo, europeo y americano. Queremos que nuestros muebles sean bonitos, prácticos, funcionales, duraderos», sigue Braulio. Entre las 30 referencias del catálogo, hay un denominador común: son piezas de madera -de abedul, roble, chopo o arce-, criaturas que producen, además, cierta empatía, que se acercan a nosotros distintas, mobiliario nada pomposo ni soberbio, sino sencillo, intemporal, compacto, muebles dispuestos a darnos lo mejor de ellos para hacernos la vida más cómoda. «Sí, que sean útiles, que se usen, que se adapten a las necesidades; es una de nuestras principales motivaciones», añade José. Más toda una declaración de principios que pone la guinda a su presentación en la web: «Todo ello es nuestro homenaje a la belleza y al trabajo de los creadores».
Son un descubrimiento Mad y a ellos, Braulio y José, que en la segunda quincena de abril estarán exponiendo en Mondo Galería de Madrid, les hemos pedido que estrenen el juego 3 X 3. Que elijan sus tres piezas favoritas y las tres obras que más les han influido en su trabajo, en su manera de diseñar.
Nuestras tres piezas favoritas:
1. contenedor02: Por ser quizá nuestro mueble más vendido y el más representativo de nuestro diseño: utilitario, comprensible, perdurable, bonito.
2. silla02: Por ser nuestro primer diseño producido; es pesada, funciona bien con pareja o sin ella; casi una escultura.
3. bureau01: Nuestro más reciente diseño producido; es versátil e introduce nuestra nueva línea de acabado aceitado; un cajón divertido y útil.
Las tres obras que más han marcado nuestro diseño:
1. Cualquier mueble de Poul Kjaerlholm: por su maestría, su calidad, porque es un referente.
2. Lámpara Luciferase, de Nacho Carbonell: por poner un ejemplo completamente opuesto al anterior y a nuestro trabajo, pero realmente conmovedor. Por traspasar los límites entre diseño y creación artística.
3. Una obra arquitectónica: la Casa Farnsworth, de Mies van der Rohe. Sin palabras.
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