Festival ‘Ellas Crean’: el imprescindible paso de musas a creadoras
El grupo The Sey Sisters. Foto: Arnau Oriol.
El grupo The Sey Sisters. Foto: Arnau Oriol.
Música contemporánea y danza se dan la mano en el festival ‘Ellas Crean’, que llega a su 16ª edición. Se celebra hasta finales de marzo en distintos museos y espacios de Madrid, al auspicio del Día de la Mujer y apoyado por la ministra de Igualdad, Irene Montero. Un programa rico y culto, que rompe estereotipos y apuesta por mostrar la innovación y el enorme y variado caudal creativo de nuestras artistas.
Muriel Romero hace su aparición en el escenario a oscuras preparado para ella en la sala de actos del Museo Arqueológico Nacional. Baila con todo su cuerpo la música que va generando ella misma. Sobre la marcha. Se trata de un ritmo heterodoxo, extraño, poco común. Pero que fluye con naturalidad y se expresa a través de sus larguísimos brazos.
Es el aperitivo de una de las más de 60 actividades programadas para este marzo, mes de la reivindicación feminista por excelencia, dentro del festival Ellas Crean. El objetivo de este proyecto, organizado por el Instituto de la Mujer y que se celebrará en diversos museos y salas de Madrid, es visibilizar el trabajo de las artistas y las creadoras en el mundo de la cultura y reivindicar su lugar.
Ellas Crean celebra este año su edición número 16 y está arropado por la ministra de Igualdad, Irene Montero. En la presentación del festival, fue clara: “Si nosotras no creamos, también se para el mundo”.
Una historia de desigualdad
Concha Hernández, directora del certamen, nos cuenta cómo están las cosas para la mujer en el terreno del arte en nuestro país: “Las cifras continúan reflejando una desigualdad persistente. Las mujeres siguen siendo mayoría en las carreras de letras y son las que más consumen cultura; pero esto no se corresponde en el terreno laboral. Porque hablar de cultura es hablar de alimento del alma, claro que sí, pero también de economía y de puestos de trabajo. Y también aquí vemos un reflejo de lo que existe en el resto de la sociedad, como son la brecha salarial, el desempleo mayor, la falta de oportunidades, la desigualdad. Todo esto sucede por el hecho de haber nacido mujeres. Seguimos estando ausentes de las programaciones en todas las disciplinas artísticas. Algo falla”.
En esta misma línea, la ministra Montero apunta: “Los datos nos hablan de una brecha de género fuerte en las artes y va más allá de los números. Las mujeres somos el 40% de las trabajadoras de las profesiones artísticas, pero son preocupantes los estereotipos culturales que limitan la producción y la expresión de las mujeres”.
Es trabajo del festival poner el foco sobre este punto, despertar conciencias y tratar de buscar remedio. Para ello, esta edición se centra en dos grandes ejes, dos disciplinas que piden a gritos mayor atención: la composición contemporánea y la danza.
Respecto a la primera, hay que destacar el concierto ‘Damas y diosas en el museo’, expresamente concebido para este festival bajo la dirección de Teresa Catalán (Premio nacional de composición musical) y de lo más innovador. El concepto es ofrecer cinco obras para percusión inspiradas en otras tantas representaciones escultóricas femeninas del Museo Arqueológico Nacional, espacio en el que tendrá lugar el concierto el 28 de marzo (esta actividad y el resto de las programadas son de entrada libre hasta completar aforo). Una de las compositoras, Alicia Díaz de la Fuente, comenta que aquí “el espectador tiene que ir a sentir, únicamente a sentir, de forma desprejuiciada”.
Otras propuestas que hay que apuntar en la agenda son la de la trombonista catalana Rita Payés y su madre, la guitarrista Elisabeth Roma, en la que nos mostrarán su visión de la música que ha marcado sus vidas (el día 22 en la sala Clamores); la artista de Nueva Orleans Leyla McCalla, que aterriza por primera vez en España el martes 24 también en Clamores; o la saxofonista Yolanda Brown (día 27 en la misma sala).
Concha Hernández señala: “Ponemos mucha atención en la programación, porque queremos huir de los estereotipos. Potenciamos a las mujeres instrumentistas, a las que lideran grupos. Hay que crear imágenes, es fundamental”.
Espectáculo de Somosdanza. Foto: Jimena Marcos.
Danza en los museos
Hablando de danza, Ellas Crean ofrece una selección de espectáculos amplísima. Casi cada día, desde ya hasta el 27 de marzo, hay funciones interesantes a las que asistir y estas tendrán lugar en distintos museos nacionales; desde El Prado, que se apunta a la iniciativa ofreciendo una pieza de la Compañía Rafaela Carrasco sobre el mito de Ariadna y su libertad de dejarse caer el abismo, hasta el Museo Nacional de Antropología, con dos bailarinas reconocidas y premiadas internacionalmente, como son Begoña Quiñones y Verónica Garzón, que nos llevan hasta el ágora, el centro de debate en la antigua Atenas. Sin olvidarnos del Museo Arqueológico Nacional, donde podremos ver a Muriel Romero, de quien hablábamos al principio de este artículo, con su sorprendente pieza Oecumene, una reflexión sobre nuestro lugar en el mundo; o del Museo Nacional del Romanticismo con Mónica Iglesias, Premio desplante minero del Festival Cante de Las Minas, que presentará Tálamo, adelanto de su próximo trabajo.
Más allá de estas dos disciplinas centrales, habrá lugar para la poesía y el teatro. La primera se desmarca con el encuentro poético entre Rosana Acquaroni y Cecilia Quílez el día 25 en la Biblioteca Nacional; y el teatro estará representado por la obra de Anaïs Allais El silencio de las murciélagas, bajo la dirección de Rachel Mastin.
Un programa amplio, diverso y 100% femenino. Porque artistas y creadoras hay, existen, y este festival busca hacerlas visibles, darles el espacio que merecen y no tienen, y poner sus trabajos en valor.
La cantante y compositora Carla. Foto: Javier Castán.
Dejar de ser musas silenciosas y tener voz propia
Irene Montero incide: “La relación de las mujeres con las artes siempre ha sido rica, pero también cuenta una historia de lucha; para poder educarse y para poder crear sin que nos acusen de ser locas, excéntricas, malas mujeres… Una lucha por hacer oír nuestras voces entre las voces comunes y para dejar de ser musas silenciosas, descritas por otros, pero a las que no se dejaba hablar en primera persona”.
La ministra también indicó en la presentación: “Hay más alumnas en los estudios artísticos, pero menos catedráticas, menos galeristas, menos programadoras. Una inmensísima mayoría de mujeres lectoras, que sostienen la industria del libro, pero luego nos encontramos con escasa representación en los premios literarios e incluso en los jurados que conceden esos galardones, así como en las tertulias más destacadas”. Y lanzó un mensaje a las mujeres creadoras y artistas: “Sin vosotras no hay reflexión, ni emoción, ni belleza, ni conmoción. Sin vosotras se quedan a oscuras regiones importantes de lo humano que debemos explorar, poner en valor y en común, porque eso hace rica, fuerte y libre a una sociedad”.
Arte y feminismo se unen en Ellas Crean con un programa culto, rico para todos los públicos y especialmente dedicado a la danza. Decía la gran Isadora Duncan que bailar era mostrar la mayor inteligencia en el cuerpo más libre.
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