Juguetoría: una factoría de juguetes para el futuro, libres y solidarios
Hoy, día grande de los Juguetes, en ‘El Asombrario’ hemos querido fijarnos en otra forma de jugar, en que otros juguetes son posibles. Son los que salen de Juguetoría, la factoría de juguetes puesta en marcha por Medialab Prado, espacio del área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, que combina el juego, el diseño, la innovación y la construcción de ciudadanía. Os contamos cómo son los seis proyectos que se seleccionaron en diciembre para su desarrollo de manera colaborativa a través del laboratorio de fabricación digital, el FabLab. Seis de los 19 que concurrieron a la convocatoria para crear prototipos.
Según nos han explicado en Medialab Prado, “los seis proyectos seleccionados alternan la experimentación con las formas, la escenografía, la construcción de alfabetos, la pedagogía y la enseñanza, con la construcción de mobiliario urbano y el diseño de ciudades imaginadas, el diseño de nuevas narrativas desde el uso de nuevas formas, la creación de personajes que promueven la ruptura de estereotipos de género o la ciencia y la tecnología en código abierto”.
Sara San Gregorio, comisaria del proyecto, explica así el eje vertebrador, la intención de Juguetoría: “El objetivo fundamental de Juguetoría es fundar una factoría de juguetes en la que jugar en común sea el eje central. Un lugar en el que se diseña para jugar, pero en el que también la investigación del juego espontáneo se integre en las decisiones de diseño. Juguetoría es una factoría porque en el fablab de Medialab-Prado hemos podido ir fabricando prototipos cada semana y sacándolos a jugar con talleres familiares cada 15 días”.
De los seis prototipos seleccionados, y cuya interacción con el público familiar ha formado parte de la programación navideña de Medialab Prado, San Gregorio destaca: “Me quedo sobre todo con que son muy diferentes entre sí, que cada uno de ellos nace de un interés personal y un recorrido profesional de los promotores que han compartido con el resto del equipo; y que esta pulsión personal ha conseguido, en tiempo record, armar equipos cohesionados”.
A mediados de diciembre, El Asombrario estuvo en la presentación de los prototipos de estos juguetes del futuro, que pueden abrir vías para distintas maneras de jugar, más libres, solidarias e igualitarias. Esto es lo que vimos. (Por cierto, todos fueron presentados por mujeres. Algo querrá decir):
‘Formas y Letras’. La diseñadora gráfica Clara Sancho presentó este diseño de un set de piezas mediante el cual se puedan formar letras y palabras de diversos alfabetos. El proyecto busca poner en valor la particular experiencia de aprendizaje y juego de los niños y las niñas que están familiarizándose con más de un alfabeto simultáneamente, así como promover el juego libre y la experimentación abierta a través de un juego de piezas de construcción. Clara Sancho partió de la experiencia de su propio hijo, que está creciendo hablando dos lenguas con alfabetos completamente distintos: castellano y árabe. Analizó a conciencia las letras de uno y otro, buscó las formas en común para llegar a un set de 16 piezas básicas. “Se trataba de buscar un lenguaje común sin maltratar las letras”. Todo un ejercicio de síntesis y de buscar lo que tenemos en común; un ejercicio que, por otra parte, todos deberíamos practicar más, en vez de andar resaltando las diferencias, lo que nos aleja del otro.
‘Criaturas infinitas’. Proyecto que surge de la puesta en común de Infinito, de Fernanda Tenorio, y Criaturas habitables, de Eva Gordo. Una profesora de natación y una arquitecta han dado forma a una propuesta anfibia, que se mueve entre el objeto y el espacio, entre la escultura y la escenografía, la indumentaria y el mobiliario, que quiere habitar un medio poco explorado para el juguete como es el agua. Un sistema de piezas blandas para que niños y niñas construyan un mundo de criaturas infinitas dentro y fuera del agua. Entre la educación y el deporte.
‘Arteria’. Esta propuesta conecta con una de las actividades que más atraen en el mundo infantil: construir y usar refugios. No le faltan referencias culturales, desde las esculturas de Chillida a los juegos de construcción creados por los Eames en los años 50. Un universo imaginario, utópico y cambiante que se desarrolla a través de un juego de construcción de mobiliario transformable que invita a imaginar nuevos usos (funcionales y anhelados). Surge de la colaboración entre el proyecto Arteria, ciudades anheladas y Vanessa Moreno, diseñadora experta en mobiliario infantil. Tienen como objetivo desarrollar una nueva línea de mobiliario conjunta abierta a la colaboración.
‘NUP Narrativas verticales’. Diseño a cargo de un colectivo multidisciplinar formado por ocho mujeres que tuvieron en estas narrativas verticales uno de los alicientes principales de creatividad y compañerismo durante el confinamiento. El resultado: un kit para creación libre de cuentos Pop up o cuentos volumétricos para construir diferentes narrativas. Tiene por objeto principal darle una dimensión tridimensional a la imaginación de niños y niñas y concebir el juego como elemento de cohesión entre el desarrollo de la infancia, la construcción del pensamiento, las narrativas y la creatividad.
‘Mx. Patate’. Nace como hackeo del icónico juguete Mr. Potato. Propone romper estereotipos y ampliar las definiciones de género que proponían y siguen proponiendo muchos juguetes, rehackeándose indefinidamente entre todas, desde la ecología y los orígenes de los juguetes más manuales, fomentando la creatividad y otras formas de juego libre. Una patata con la que subvertir entre todxs la construcción social que supone el género. Romper esquemas. Hablar de la validez de todo tipo de cuerpos. Desarrollado por María Vila Fernández, Lucía Regueiro y Aitana López Rodrigo.
‘Alquimétricos’. Un proyecto internacional que tiene como objetivo la creación de una colección de juguetes educativos de bajo coste que acercan la ciencia, la tecnología, la ingeniería, las artes y las matemáticas al público de una manera intuitiva, simple y divertida. Un juguete de código abierto para aprender geodesias, a partir del planteamiento lanzado en 2015 desde Argentina por Fernando Daguanno. La filosofía del proyecto es desarrollar y replicar materiales abiertos y hackeables, y divulgar el uso de tecnologías educativas accesibles para democratizar el conocimiento y emancipar comunidades.
Comentarios
Por Paola, el 08 enero 2021
En Chos Malal, Argentina hemos presentado una propuesta desde la perspectiva que uds evocan… nos gustaría leerles más… abraxotes