La voz que narra en femenino contra viento y marea
La narrativa de las diferencias de género nos afecta a todos en ámbitos tan dispares y tan unidos como la ciencia, la salud del corazón, el periodismo, el mundo del libro y la fotografía. Hay escritoras que nos impulsan con personajes femeninos singulares. Entre ellas se encuentran Rosa Montero, Matilde Asensi, Almudena Grandes, Inma Chacón y Montserrat Roig junto a Maya Angelou, Marta Vasallo, Amelia Biagioni Gabriela Mistral y Elena Poniatowska. Rompen moldes, resquebrajan mitos. Así oímos la voz que pertenece a lo femenino, que crea vida, transforma y nos beneficia a todos por igual.
(La fotografía de Laura Torrado, Trashumance ilustra y ha inspirado este artículo)
Puedes seguir a la autora en twitter
Hace unos días podíamos leer en la prensa sobre la disparidad en las prestaciones por desempleo entre mujeres y hombres. Todo esto ocurre dentro del marco mundial en el que la población total supera los 7.000 millones. Los hombres alcanzan el 50, 4 % y las mujeres, 49,6%. Estamos bien repartidos según Worldometers y el Fondo de población de las Naciones Unidas. Las mujeres somos la mitad del planeta. Según los últimos datos de 2011, en España residen 23.428.060 mujeres frente a 22.724.866 hombres. A todos dedica sus versos la gran poetisa norteamericana Maya Angelou. Una mujer con una biografía apasionante que viajó por todo el mundo, bailó con Martha Graham, colaboró con Malcolm X y después de su muerte, con Martin Luther King, siempre muy activa en la lucha por los derechos civiles. Su obra y su activismo político han derribado múltiples barreras. En esa sana costumbre de algunos presidentes de los EE UU de invitar a un poeta para que recite sus versos durante el acto de investidura, fue Clinton quien llamó a Angelou. Su poema Mujer fenomenal es un canto al misterio femenino y su fuerza. A continuación presentamos apenas una muestra por motivos de espacio, para leerlo al completo en castellano se puede clicar aquí y para escucharlo en versión original leído por Maya Angelou, aquí.
Se esfuerzan mucho, pero no pueden tocar mi misterio interior.
Cuando intento mostrárselo dicen que no logran verlo.
Y digo: está en la curvatura de mi espalda, el sol de mi sonrisa,
el porte de mis pechos, la gracia de mi estilo.
Soy una mujer fenomenalmente. Mujer fenomenal, esa soy yo.
¿Ahora comprendes por qué mi cabeza no se inclina?
No chillo ni hago aspavientos, ni tengo que hablar a voz en grito.
Cuando me veas pasar, tendrás que sentir orgullo.
Y digo: está en el sonido de mis tacones, la onda de mi cabello,
la palma de mi mano, la necesidad de mis afectos.
Porque soy una mujer fenomenalmente.
Mujer fenomenal.
Esa soy yo.
Mujer fenomenal, Maya Angelou
En el último Libro blanco sobre la situación de las mujeres en la ciencia española publicado en 2011 se refleja la situación desde la década anterior. Allí nos encontramos con la siguiente afirmación: “No es menos sangrante por conocido el hecho de que en áreas como la Pediatría o la Ginecología y Obstetricia siga sin haber una sola catedrática”. Todo lo cual sucede a pesar de que “hoy en día las mujeres son mayoría entre el alumnado universitario y terminan sus estudios con expedientes académicos mejores en promedio que los de sus compañeros…”. La probabilidad de que un profesor titular se convierta en catedrático universitario es 2,5 veces superior para un hombre que para una mujer cuando ambos tienen características profesionales similares.
Aquí en El Asombrario & Co hemos conocido a la periodista Francesca Borri que cobraría 15.000 €, no es un dato ligero, por posar desnuda y 50€ por una columna desde el frente de guerra. Y no olvidemos a Shada Salhab que encarna a tantas otras mujeres que rompen mitos con apenas 20 años y mucho en contra. De romper moldes y estereotipos también se ocupa la fotógrafa Laura Torrado. Como podemos inferir de lo expuesto hasta ahora, no depende de la formación, ni del estatus laboral ni del lugar del mundo en el que nos encontremos. Es una cuestión mucho mayor que nos reclama a todos. Hace muchos años que se repite eso de echarnos del paraíso…
No eras rubia
como durante siglos te retrataron insolentes
los dominadores.
No viniste a distraer la soledad de ningún señor
sino a beber hasta el final tu propia soledad.
Marta Vasallo, Eclipse parcial, Eva
Se trata de un tema de alcance mundial que requiere atención local. Lo que nos contamos sobre infinidad de cuestiones está marcado por la visión masculina, en unos casos, y por la del poder, en otros (FMI, patronales, COI y similares). ¿Difícil de creer? Observemos lo que sucede, por ejemplo, con las enfermedades del corazón. Sí, del corazón. Es un ejemplo de narrativa predominante que nos viene de perlas. Es realmente sorprendente y una muestra irrefutable de cómo nos narramos. Todo es narración y depende del autor. Las enfermedades del corazón son la causa de la muerte de más mujeres que todos los tipos de cáncer juntos. A todos nos suena que son los hombres los que padecen más del corazón como si la cosa no fuera con las mujeres, ¿verdad? En el mundo han fallecido 400.000 mujeres a causa del cáncer de pecho. Y 8.600.000 han muerto a causa de un ataque de corazón. A nivel mundial e histórico, en los estudios sobre este músculo participan apenas un 24% de mujeres. Durante más de 50 años las mujeres han sido diagnosticadas siguiendo los parámetros descubiertos que afectan solamente a los hombres. Pero los síntomas son muy diferentes, casi opuestos. El corazón de una mujer y el de un hombre son fisiológicamente distintos y la manera en que responden en una crisis de salud, también varía. La mayoría de veces el diagnóstico no es ajustado porque los estudios solo contemplan datos sobre el corazón del hombre. Apenas hay casuística. En el Congreso de enfermedades cardiovasculares SEC 2011 se notificó que más de 65.000 mujeres mueren al año en España a consecuencia de una enfermedad cardiovascular, lo que supone el 35,10% del total de fallecimientos femeninos en el país. Todos los datos citados provienen del Women’s Heart Center del Cedars-Sinai Heart Institute. La buena noticia es que las investigaciones más recientes apuntan a que las células madre femeninas pueden cambiar el panorama cardíaco general, son altamente beneficiosas y más eficaces para todos, mujeres y hombres. ¿Y por qué? Porque el cuerpo de la mujer está preparado para crear vida.
Yo me resisto,
en la calle de los ahorcados,
a acatar la orden
de ser tibia y cautelosa,
de asirme a la seguridad,
de acomodarme en la costumbre,
de usar reloj y placidez,
aventura a cuerda,
palabra pálida y mortal
y ojos con límites.Amelia Biagioni, Manifiesto
¿Y en el sector del libro? No hay datos. La información, los datos y el sector del libro no suelen darse de la mano y en este caso, mucho menos. ¿Cuál es el porcentaje de escritoras y escritores? ¿Y cuál es de trabajadoras en el sector? ¿Cuántas mujeres ocupan cargos de responsabilidad en el mundo de la edición? ¿Hay diferencias salariales? Ninguna de estas preguntas tiene respuesta. Lo cual, en un sector que se dedica a la cultura siempre llama poderosamente la atención. Se dice, se comenta, que las autoras apenas alcanzan el 10% de los catálogos. Necesitamos un mapa por géneros de la cultura y del sector del libro para encontrar caminos en los que todos y cada uno ocupemos nuestros destinos. Hace unos años la gran escritora mexicana Elena Poniatowska ponía el dedo en la llaga sin miedo:
“Bueno, pues eso son las escritoras latinoamericanas, las leonas del zoológico, feas, opacas, con una que otra brizna de paja en el lomo vencido, las leonas, las que están siempre en segundo plano, las que quedaron como costales gastados después de la última cría, mientras que el león, pegado a los barrotes, haga lo que haga, con su espléndida cabellera de rey de la selva, es el que ruge, se impone y de un solo bocado se traga al mundo.El león en donde quiera que esté impone sus condiciones, la leona jamás. Carlos Fuentes alza su cabeza magnífica de león de la Metro Goldwin Mayer, sacude sus crines de oro, y saluda a otro león también coronado, a Mario Vargas Llosa que a su imagen y semejanza enseña unos dientes tan atractivos como el del gato de Cheshire cuya sonrisa veía Alicia en el país de las maravillas cada vez que se apagaba la luz.”
Elena Poniatowska, Mujeres de palabra: mujeres que escriben
La autora de Harry Potter firmó su primer manuscrito como Joanne Rowling. Pero sus editores, temiendo que el libro no llamara la atención de los niños por llevar el nombre de una mujer, le sugirieron que firmara como J. K. Rowling. Las hermanas Brönte se hicieron pasar por Currer, Ellis y Acton; Aurore Duphin es mejor conocida como George Sand; Mary Ann Evans es George Eliot; Cecilia Bölh de Faber firmaba como Fernán Caballero; Karen Blixen fue Isak Dinesen. Personalmente no creo en las diferencias de género entre los autores. Un gran misógino como lo fue Tolstoi escribió la magnífica Ana Karenina. Aunque no soy seguidora de Antonio Gala, reconozco que pocos como él transmiten la intimidad femenina. Si leemos un texto de un autor, sin saber de quién se trata, habrá tantas posibilidades de acertar su género como de no hacerlo. Todos los escritores nos escriben al alma, a diferentes aspectos de nuestro espíritu: más juguetón o más profundo, más superficial o más social, más introspectivo o más romántico, más inteligente o menos…
Me gustaría rescatar a algunas autoras para esa parte del alma que es femenina y que necesita alimentarse de personajes de mujeres fuertes narrados por sus hermanas escritoras. Ni están todas las que son ni son todas las que están. No es una lista. Puede enriquecerse con las aportaciones de nuestros lectores, ojalá así sea. Sí figuran algunas de las muchas que me han enseñado a que es más importante quemar la cena que dejar de escribir o bordar o mirar el cielo o lo que me permite florecer como individuo que se mueve en la famosa habitación de Virginia Woolf. Un gran recurso el de quemar la cena, lo recomiendo y de manera simbólica el día 9 de cada mes, justo antes de acabar de contar hasta 10.
Creo en mi corazón, ramo de aromas
que mi Señor como una fronda agita,
perfumando de amor toda la vida
y haciéndola bendita.Creo en mi corazón, el que no pide
nada porque es capaz del sumo ensueño
y abraza en el ensueño lo creado:
¡inmenso dueño!Gabriela Mistral, Credo
Las siguientes autoras suelen presentar personajes femeninos que inspiran y nos despiertan. Son alimento indispensable para nuestra alma. Son escritoras de estilos sumamente diferentes. Cada una de ellas, como tantas otras autoras, suelen señalar el camino de la imaginación y la creatividad como el que nos conducirá a nuestras verdades, ilusiones, deseos, emociones y esencias. Creadoras siempre, el secreto de la fuerza femenina y sus células dadoras de vida, las autoras mencionadas nos hablan de las mujeres que nos impulsan a todos a ser más fuertes. Recordemos así a todas aquellas que piden perdón a la sociedad hostil y masculina por atreverse a ingresar al mundo de la cultura o al mundo que sea. Son casi infinitos los obstáculos que todas debemos enfrentar para no caernos exhaustas antes de llegar a la meta. En la literatura se nos ha retratado como Eva y Pandora, como la idealizada Beatriz o su contraparte doméstica Dulcinea, como la mujer que se disfraza de hombre o la que cae junto a la dama de las Camelias y luce una letra escarlata hasta las insatisfechas Madame Bovary, la Regenta, Anna Karenina, Fortunata y Jacinta. Pero son muchas más.
Rosa Montero. Es la escritora que se ha ocupado de lo femenino en multitud de aspectos y que ha permitido a más de una generación encontrar su voz y ver reflejada su propia humanidad. Quiero recuperar un libro de 1990 que parece premonitorio: Temblor. Allí la Ley lo es todo y lo rige todo. Hay cuatro partes cuyos títulos ilustran lo que nos espera: ‘Tiempo de Fe’, ‘Camino del Norte’, ‘La medida del desorden’ y ‘El corazón de las tinieblas’. La protagonista se llama Agua Fría y es, cómo no, quien rechaza la ley, el orden forzado, las normas que no sirven para nada más que controlarnos. Hay también una suerte de Matrix y un juego entre lo que es real y no lo es. Talapot es el gran palacio y a la vez fortaleza, desde allí se anuncian falsos postulados en medio del caos reinante, motivado por el evidente deterioro del mundo. ¿A alguien le suena familiar? Yo se lo recomendaría a más de uno de nuestros políticos (sí, soy irreductiblemente persona de fe, no tengo remedio). La desigualdad aumenta a pasos agigantados e impone la ‘muerte verdadera’ para la mayoría de los seres humanos. ¿Qué hará Agua Fría? Yo estoy covencida de que con la prerrogativa universal y atemporal de personaje que es, ya leía otro libro de su autora: La loca de la casa. Porque para dar con la verdad es necesaria la imaginación. Porque con La loca de la casa se perfila un retrato de todo lo innombrable que nos nutre y que tantas veces no somos capaces de definir. Seguramente ya se haya sentido amazona y cátara irreductible. Agua Fría es todas las Madame Curie que nos habitan y se purifica en cada uno de sus lectores dándose en ofrenda hacia la libertad.
Inma Chacón nos ha contado sobre mujeres que descubren otros mundos y sobre princesas indias. En Tiempo de arena narra sobre el momento en que las mujeres comenzaron a romper moldes sociales de manera cada vez más pública en la España de finales del siglo XIX y principios del XX. Es el tiempo de las sufragistas. Es una historia de tres hermanas, sobre la fuerza de los sentimientos y el diálogo, también es una intriga familiar en la que los secretos y las apariencias juegan un gran papel y es un retrato de los primeros movimientos en defensa de la igualdad en nuestro país. Es un reflejo de más de una mujer más allá del tiempo en el que muchas generaciones pueden tomar ejemplo y fuerza. Sorprenderá al lector la modernidad que se llegó a vivir y que luego fue completamente destruída.
Matilde Asensi nos ha acercado a la gran literatura de aventuras de la mano de heroínas muy modernas. Nada de mujeres masculinizadas, nada de Lara Croft, son mujeres que hacen la compra y agudizan el ingenio en situaciones excepcionales. Son mujeres profesionales y de cultura que llevan una vida normal hasta que las circunstancias requieren algo más de ellas y han de romper con todo lo conocido, incluso a veces hasta con la familia, para poder ser libres. Matilde Asensi nos eleva a categorías intrépidas sin necesidad de que nos olvidemos de que somos mujeres, femeninas, emocionales e inteligentes, todo a la vez enarbolando nuestras virtudes y defectos en pos de aventuras dignas de James Bond o Bourne a través incluso del tiempo. Luego ha recuperado la figura de la extraordinaria Doña Isabel Barreto la primera mujer almirante allá por el siglo XVI Sus primeros años se cuentan en Tierra firme y la encarna el personaje de Catalina Solís, quien sin duda mantiene la llama de Doña Barreto resplandeciente para todos.
Almudena Grandes empezó rompiendo estereotipos femeninos con Lulú y su búsqueda personal a través de su relación con el sexo desde la ternura, el descubrimiento y la osadía hasta los infiernos más temidos. Las edades de Lulú apareció en un momento, no hace tanto tampoco, en que un personaje femenino y sexual era tildado de puta. Luego con Atlas de geografía humana nos presentaba a Rosa, Marisa, Fran y Ana, cuatro tipo de mujeres muy cercanas en la que resultará sencillo verse y reconocerse. El amor y el desamor, la rutina y el no sentirse a la altura de las circunstancias que pasan y se superan son algunos de los temas por los que esta escritora nos ayuda a transitar contra viento y marea a pesar de los aires difíciles, reinventándonos.
Montserrat Roig además de delicada y punzante escritora fue activista de izquierdas en favor de los derechos de la mujer. Nos habla de la mujer en familia y de la que busca su lugar en el mundo. El tiempo de las cerezas, Ramona, adiós y La hora violeta forman una trilogía sobre la familia de los Miralpeix y Claret. En El tiempo de las cerezas, Natalia se marcha de su Barcelona natal para volver al cabo de catorce años de vivir en Inglaterra sin haber solucionado aún sus conflictos personales con los fantasmas del pasado. ¿Le sucederá algo similar a las jóvenes que emigran en la actualidad? Las protagonistas de Montserrat Roig son mujeres que se reafirman. Y hacen algo más: denuncian. Se quejan sobre el vacío en la cuestión femenina y acusan a los hombres de un pacto de silencio sean de derechas o izquierdas. Ni transición ni tonterías, para Natalia es imprescindible recuperar los logros que las mujeres habían alcanzado en 1932 y que el franquismo había suprimido violentamente. Al leer a esta autora, además de disfrutar de su exquisita prosa, rendimos homenaje a todas las que fuimos y que nos impulsan. Y, sin lugar a dudas, a las que aún podemos ser.
Cuando las mujeres se den cuenta de que una mujer es un ser extraordinario, lleno de gracia y de armonía, como un árbol, una ola de mar, entonces escribirán. Cuando sepan que una mujer lleva a todo el universo en su seno, el sol, el cielo, los campos y las ciudades, cuando acepten que tienen dentro de sí algo maravilloso y estén dispuestas a decirlo, a gritarlo, entonces abrirán las compuertas, nos darán su intimidad con la tierra, consigo mismas, sin tapujos, sin hipocresía; no temerán perder el hombre, puesto que se habrán ganado a sí mismas y si la sociedad las rechaza es que ellas se habrán rechazado primero; entonces fluirá el agua que aún no fluye, no sólo el líquido amniótico que hace vivir al feto sino toda esa agua que proviene de fuentes desconocidas, insospechadas, la catarata se nos vendrá encima con toda su violencia, todo lo que las mujeres han guardado dentro de sí durante siglos de represión y también, por qué no decirlo, de indolencia.
Elena Poniatowska, Mujeres de palabra: mujeres que escriben
Muy felices lecturas, ríos de libertad, rafeantes destinos y barbas a remojar.
Comentarios
Por Glauca, el 24 agosto 2013
Mil gracias por el articulo y la información. Yo también recomiendo a Gioconda Belli.
Por Sardiflor, el 25 agosto 2013
Hola, Glauca,
muchas gracias por tomarte el tiempo para dejar tu aportación. Sin lugar a dudas Gioconda Belli es una autora que reivindica lo profundamente femenino, tanto en su poesía como en prosa. ¿Hay alguna obra en particular o verso que propongas para inspiración?
Aquí te dejo uno de sus poemas, uno que me ha tocado especialmente cada vez que lo he leído. Se titula No me arrepiento de nada y está en El ojo de la mujer
Desde la mujer que soy,
a veces me da por contemplar
aquellas que pude haber sido;
las mujeres primorosas,
hacendosas, buenas esposas,
dechado de virtudes,
que deseara mi madre.
No sé por qué
la vida entera he pasado
revelándome contra ellas.
Odio sus amenazas en mi cuerpo.
La culpa que sus vidas impecables,
por extraño maleficio,
me inspiran.
Reniego de sus buenos oficios;
de los llantos a escondidas del esposo,
del pudor de su desnudez
bajo la planchada y almidonada ropa interior.
Estas mujeres, sin embargo,
me miran desde el interior de los espejos,
levantan su dedo acusador
y, a veces, cedo a sus miradas de reproche
y quiero ganarme la aceptación universal,
ser la «niña buena», la «mujer decente»
la Gioconda irreprochable.
Sacarme diez en conducta
con el partido, el estado, las amistades,
mi familia, mis hijos y todos los demás seres
que abundantes pueblan este mundo nuestro.
En esta contradicción inevitable
entre lo que debió haber sido y lo que es,
he librado numerosas batallas mortales,
batallas a mordiscos de ellas contra mí
-ellas habitando en mí queriendo ser yo misma-
transgrediendo maternos mandamientos,
desgarro adolorida y a trompicones
a las mujeres internas
que, desde la infancia, me retuercen los ojos
porque no quepo en el molde perfecto de sus sueños,
porque me atrevo a ser esta loca, falible, tierna y vulnerable,
que se enamora como alma en pena
de causas justas, hombres hermosos,
y palabras juguetonas.
Porque, de adulta, me atreví a vivir la niñez vedada,
e hice el amor sobre escritorios
-en horas de oficina-
y rompí lazos inviolables
y me atreví a gozar
el cuerpo sano y sinuoso
con que los genes de todos mis ancestros
me dotaron.
No culpo a nadie. Más bien les agradezco los dones.
No me arrepiento de nada, como dijo la Edith Piaf.
Pero en los pozos oscuros en que me hundo,
cuando, en las mañanas, no más abrir los ojos,
siento las lágrimas pujando;
veo a esas otras mujeres esperando en el vestíbulo,
blandiendo condenas contra mi felicidad.
Impertérritas niñas buenas me circundan
y danzan sus canciones infantiles contra mí
contra esta mujer
hecha y derecha,
plena.
Esta mujer de pechos en pecho
y caderas anchas
que, por mi madre y contra ella,
me gusta ser.
Por Carmen, el 24 agosto 2013
Excelente artículo. He disfrutado leyéndolo y he tomado nota para próximas lecturas de algunas de las autoras citadas, que ya conocía, y de otras que acabo de conocer. La fotografía que acompaña al artículo es impactante y misteriosa. Como dato negativo a citar es el escaso número de hombres que leen obras escritas por mujeres y como dato positivo el que hay un mayor número de mujeres lectoras que de hombres lectores y que esa mayoría de mujeres lectoras tienen poder para promocionar a las buenas escritoras a las que el status editorial y literario ignoran o ningunean.
Por Sardiflor, el 25 agosto 2013
Hola, Carmen,
muchas gracias por tus amables palabras y por reflexionar junto a nosotros. Sí ocurre que las lectoras son muchas más y son las mujeres las que determinan una parte del mercado editorial, muchos sellos comerciales han nacido solo para ellas. Si hay hombres que leen o no a autoras, realmente no lo sé. ¿No habrá de todo? A mí no me gusta el terror ni en libros, ni en series ni en películas y no lo leo aún habiendo grandes escritores que se dedican al género. Con ello quiero decir que hay mucho donde elegir Puede que yo no lea a ciertos autores, pero al fin y al cabo se trata de libertad, ¿no crees? 🙂 Que se lea mucho y variado es lo que a mí personalmente me gusta y que en España con la gran literatura que tenemos, pues que se lea aún más es lo que me mola 😉
Olas de besos
Por Carmen Martínez Gimeno, el 24 agosto 2013
He leído con interés este excelente artículo. Hace bastantes años, cuando iba a publicar mi primera novela, también me aconsejaron que lo hiciera con iniciales para ocultar mi condición de mujer. Las cosas van cambiando lentamente gracias a que somos muchas las que leemos.
Conozco a muchas de las escritoras citadas (confieso que alguna no me gusta en absoluto) y tomo nota de las restantes para futuras lecturas.
Declaro mi absoluta predilección por dos escritoras mexicanas, Elena Poniatowska y Ángeles Mastretta. Pienso que al menos a ellas las leen tanto hombres como mujeres por su altísima calidad literaria. Ese es el camino.
Por Sardiflor, el 25 agosto 2013
Hola, Carmen MG,
muchas gracias por tomarte el tiempo para dejar aquí tu comentario y compartir tus gustos y experiencias. De Masttretta mi preferido es El cielo de los leones, ¿Y el tuyo? Es una autora poco conocida en España, a veces tengo esa sensación (a no ser por el famoso plagio y ni así)
«Si el tiempo lo inventamos los humanos, podemos escondernos de su cuenta obsesiva y concentrar nuestras fuerzas, nuestro talento, nuestro imprescindible valor, en la emoción que debería darnos cada instante de la vida» de El cielo de los leones
Olas de besos
Por Sofía Montalvo, el 24 agosto 2013
Me gustó el artículo, aunque echo de menos a Carmen Martín Gaite
Por Sardiflor, el 25 agosto 2013
Hola, Sofía,
muchas gracias por aceptar la invitación a recomendar autoras 🙂 ¿Cuál es tu preferido de esta autora? Para mí, Retahílas. Pero se debe también a que lo leí en la adolescencia y entonces me enamoré de esta autora. No soy nada mitómana y fíjate que cuando falleció me embargó una enorme, enorme tristeza. Solo me ha pasado con ella y Vázquez Montalbán, no se trata para mí solamente de leerlos, había algo íntimo de mí que reconocía en sus libros. No son los únicos, claro, pero con ellos dos la afinidad fue especial. El amor es así,¿ verdad?
Te dejo con uno de su versos
https://www.youtube.com/watch?v=aZ7YwOe9zJ4
y muchos besos
Por Paula., el 24 agosto 2013
Ustedes perdonen, pero… ¿en serio, el Asombrario &Co.? ¿Están descubriendo la pólvora, a estas alturas? ¿O es que con esto creen que ya cumplieron con su cuota de igualdad, sea eso lo que fuere?
Rosa Montero, Matilde Asensi, Almudena Grandes…
No tengo absolutamente nada en contra de ellas, aparte de que son la excepción a la mayoría silenciosa femenina, la literatura invisible: estas autoras que mencionan publican en las editoriales multimillonarias.
«Contra viento y marea», pues no -marketing, planetas, prisa… (y no niego «calidades», aunque varían, que gustos hay para todo: yo personalmente prefiero, de las que nombran, las de América, y M. Roig, claro; pero ¿la están descubriendo AHORA?).
De esas, las de contra viento y marea, hay muchísimas otras. La nómina les salió ralita, parece sacada de unos apuntes de bachillerato, o de la E.S.O., y malos, del Rincón del Vago.
Esfuércense para la próxima. Se lo ruego.
Por la literatura.
Por la voz que pertenece a lo femenino.
Por Sardiflor, el 25 agosto 2013
Hola, Paula,
después de leerte la primera vez, bueno, mejor no te cuento lo que pensé, pero te veía con turbante y barba escondida en las montañas de Afganistán. Luego empecé a averiguar quién eres, para entender qué te lleva a atacar de esta manera, como si yo fuera un trapo de m… No, no es la opinión discordante y nada argumentada, tampoco es las formas,. es esa rabia tan lejana la que me llama la atención. Entré en tu página, muy interesante por cierto, dedicada al síndrome de Asperger. Allí hay unas diapos de slideshare dedicadas a tratar bien, a cómo tratar bien a alguien con Síndrome de Asperger. ¿Y por qué no tratar bien al resto de humanos? Por cierto, nota al margen, te recomiendo al serie televisiva The Bridge, la detective protagonista interepretada por una Diane Kruger en estado de gracia y que tiene Asperger. Luego vi que has publicado con Baile del sol y que eres profe de literatura. Espero que no trates en ningún momento a ninguno de tus alumnos como lo has hecho conmigo porque has de ser consciente de que llegas a ser rabiosamente ciega. Seguramente y argumentando tienes más de un punto interesante a exponer. Pero como ni tú ni yo hemos inventado la pólvora ( y a mí ni me apetece) vamos a intentar observar las cosas desde diferentes versiones. Las autoras que cito, pues, podrías anotar que cada una pertenece a una visión y un lector muy diferente. Y que para ilustrar un tema tan esencial como la diferencia de género he utilizado a autoras que hablan a mucha gente y que cubren un amplio espectro. En El Asombrario hay muchos lectores y son de todo tipo y quiero dirigirme a todos en un tema como la lucha porque tengamos las mismas oportunidades que los hombres. Tu manera de expresarte es muy digna de la diosa Kali cuando crees que defiendes tu justicia. Y haces daño de forma gratuita. Todo tiene sus causas, tú tendrás las tuyas. Te dejo un par devideos y uno de mis poemas preferidos que creo que no conocerás y que sé que disfrutarás.
Este te lo dedico muy especialmente, cada palabra habla de ti: https://www.youtube.com/watch?v=V9fKz9b1-K8
El poema es de Silvya Plath, está en Ariel y se titula The hanging man (las versiones en castellano pierden mucho, no por nada se considera un poema de difícil traducción)
By the roots of my hair some god got hold of me.
I sizzled in his blue volts like a desert prophet.
The nights snapped out of sight like a lizard’s eyelid:
A world of bald white days in a shadeless socket.
A vulturous boredom pinned me in this tree.
If he were I, he would do what I did.
Y la canción es de Cindi Lauper https://www.youtube.com/watch?v=PIb6AZdTr-A
Por Paula., el 25 agosto 2013
Estimada Sardiflor:
Gracias por el poema de Plath, no lo conocía, y desde luego el mito de Prometeo (aunque mi inglés da pena, y no sé si lo he interpretado bien: ni he mirado el diccionario e igual estoy metiendo la pata hasta el fondo) es muy rico literariamente; además, agradezco la delicadeza de la connotación de buitre carroñero destripador que no puede evitar lo que hace (como el alacrán de la fábula), con el plus de la imagen en el espejo; ya puestos a demostrar que no se está conforme con algo, reconozco que me ganas en sutileza y elaboración en la respuesta. Qué curioso, Prometeo, el mismo mito que usó Mary Shelley. (Modestamente, tengo un cuento “a cuento” http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=1984836 )
Tú dices: “Las autoras que cito, pues, podrías anotar que cada una pertenece a una visión y un lector muy diferente. Y que para ilustrar un tema tan esencial como la diferencia de género he utilizado a autoras que hablan a mucha gente y que cubren un amplio espectro. En El Asombrario hay muchos lectores y son de todo tipo y quiero dirigirme a todos en un tema como la lucha porque tengamos las mismas oportunidades que los hombres. Tu manera de expresarte es muy digna de la diosa Kali cuando crees que defiendes tu justicia. Y haces daño de forma gratuita.”
En primer lugar quiero reconocer que tienes razón en varias cosas: la primera, que llego a ser “rabiosamente ciega”. Pido perdón si he hecho daño. Estoy escaldada de supuestos artículos para cubrir cuotas y quedar bien. Me apresuré quizás. La nómina de las autoras que mencionabas no me parecía la más representativa de las autoras silenciadas… precisamente por lo que digo en el comentario y no voy a repetir. Justo la parte literaria del artículo (no la selección de textos) fue la que me pareció más… estándar, no lo sé explicar mejor. La otra parte (enfermedades coronarias, estadísticas de empleo y acceso a cargos académicos…) fue la que más me llenó y me llegó. Máxime cuando en el campo de los trastornos del espectro autista – síndrome de asperger (que ya sabes que me interesa, puesto que viste la página que llevo) recién ahora se están empezando a dar cuenta de que no es que haya menos niñas y mujeres con TEA – Asperger, sino que los criterios para el diagnóstico se han especificado a partir de los varones (en la literatura médica se dice que la prevalencia por sexos es de 4 varones por 1 mujer), por lo que miles y miles de mujeres están sin diagnosticar ni tratar y son más proclives al maltrato institucional (no acceden a terapias que podrían cambiar sus vidas y evitar que fueran dependientes, son consideradas excéntricas, no se les da el certificado de discapacidad…). Consulta si quieres Autism in Pink. Y todo se me hizo un totum revolutum, un gato rabioso en la barriga, cual niña chica me frustré y agarré una perreta. Porque esperaba más de El Asombrario. Porque últimamente El Diario me está decepcionando. Porque… bueno, supongo que es mi problema, claro, y tú no tienes la culpa. Vuelvo por tanto a disculparme.
Ahora bien, no desvaloricé a las autoras mencionadas. Ni a sus trayectorias. Solo dije que invisibles, lo que se dice invisibles, no eran.
On the other hand, y para tu tranquilidad (y la mía) te aseguro que jamás, jamás, he tratado a ningún alumno como no quisiera que se tratara a mi propia hija. (Pero…yo no creo que tú seas mi alumna, ¿no?; resulta confuso, esto.)
Por cierto, si entras en https://www.facebook.com/AspercanNoticiasDeTeaYAspergerCanarias verás que hemos incluido varias referencias a la serie The Bridge. Incluso planteé que me causaba desasosiego que la Fox se usara el tema de Juárez para “sacar perras”, lo cual me horroriza de por sí. Pero Diane Krüger lo hace muy bien. (No sé cómo sería la serie original sueco-danesa, Bron, de 2011). Hay varias páginas en internet sobre películas, series, libros, arte, etc. y autismo – asperger, por si te interesa el tema.
El poema de Carmen Gaite, que me dedicas verso a verso, ¿qué puedo decir/hacer sino darte las gracias? ¿Eh?
Ahora, si eres tan amable, lo del vídeo de Cyndi Lauper (anda que no lleva años esa carta, como decimos en Canarias), ¿…que me relaje, o algo? Me encantaría JUST WANT FUN. I mean it.
Insisto: siento haber sido borde. Y sobre todo, impulsiva, dita sea. El lóbulo prefrontal, ya se sabe.
Espero que aceptes mis disculpas y que por favor cuando alguien te escriba algo que no te guste no pienses enseguida que es un talibán con barba.
Lo de la barba me llegó al alma.
Saludos.
Por Manuel, el 24 agosto 2013
Aunque se suponga que es sabido, creo que nunca vienen mal artículos que nos recuerden estas circunstancias. Aquí dejo algo parecido del mundo del arte (publicado en 2008): http://artivismo.es/2007/10/24/mujeres-en-el-arte-del-siglo-xxi-ii/
Un saludo,
M.
Por Sardiflor, el 25 agosto 2013
Hola, Manuel,
muchas gracias por tomarte tu tiempo para aportar más reflexión. Nunca vienen mal, y es más: creo que son necesarios. Y además debe de haber una confluencia astral y planetaria o la luna o algo así porque desde el mismo viernes en más de un medio se toca la misma cuestión desde diferentes ángulos. A mí eso me encanta y espero que así la cuestión cobre más fuerza 😉 El artículo que me pasas aquí es muy interesante. Muchas gracias.
Olas de besos
Por Charo, el 25 agosto 2013
Estupendo artículo. Yo recomiendo a Elizabeth Gaskell.
Por Sardiflor, el 25 agosto 2013
Hola, Charo,
muchas gracias por compartir esta recomendación y haber aceptado la invitación para hacerlo. No sé si la habrás visto, te la paso de todas maneras, la serie de la BBC sobre Madres e hijas está en youtube y es otra manera de disfrutar de esta autora https://www.youtube.com/watch?v=hzPGc03lXu0&list=PL7F281C670CE742FD
Aunque mi preferida es North and South https://www.youtube.com/watch?v=NRO-IA1jjU8 tanto la serie como el libro 😉
Y uno de sus poemas más delicados, dedicado a las madres:
She is very touching in her sweet little marks of affection.
Once or twice, when I have seemed unhappy about little things,
she has come and held up her little mouth to be kissed.
Last night I was in pain, and made a sort of moan. She was lying by me, apparently asleep; but as if her gentle instinct of love prompted her even then, she pressed to me, saying, ‘Kiss, Mama,’
These are trifles, but how very precious may the remembrance of them become.
Olas de besos
Por emma, el 25 agosto 2013
He descubierto con gratitud una serie de visitantes desde este espacio y la curiosidad me trajo a él rápidamente. Gracias por el enlace a mi sitio.
Leí con suma atención el artículo porque es un tema prioritario para mí. Nunca me cansa ni está demás repetir, insistir, profundizar y seguir trabajando.
Si a mí me preguntan porqué solo publico mujeres, aún no tengo una respuesta clara y concisa. Sé que las prefiero, las elijo. Quiero dedicar mi tiempo a ellas. Porque las siento cercanas. Hablan por mí.
Y hay una frase, tan simple y que me gusta tanto: «La mujer escribe y eso es lo que importa».
Gracias por esta nota (elegí «Manifiesto», de Amelia Biagioni, para publicar esta noche. Saludos desde Argentina.
Por Sardiflor, el 27 agosto 2013
Muy querida Emma,
¡muchas gracias a ti! Esto es un auténtico «crossover», me encanta! tendremos que repetirlo 😉 Me encantó tu traducción y te descubría gracias a la Dra Angelou que siempre, siempre, sin fallar jamás, abre puertas a parajes maravillosos.
Un enorme abrazo desde estas orillas y olas de besos oecánicos
Por Editora con carrito, el 30 agosto 2013
Fantástico artículo, y aunque esto ya parezca vicio, también me ha gustado cómo has respondido a Paula (un comentario de formas poco acertadas) y cómo te ha vuelto a responder ella. De hecho, en cierta medida coincido con ella en que la parte más interesante, quizás porque no estamos acostumbrados a tantos datos tan bien hilados en una sección de Literatura, es la que no habla de Literatura, y que la muestra de escritoras (y entiendo perfectamente lo de que es una selección «de amplio espectro») se queda más «coja» en comparación. Y ya lo han dicho, pero es que no citar a la Gaite, ay ay ay 😉
Ya puestos, me permito mencionar dos grandes personajes masculinos creados por mujeres: Leonardo Villalba (cómo no, de «nuestra» Gaite) y Sergio Prim, de Belén Gopegui.
Otro par de recomendaciones poéticas:
Cristina Peri Rossi: Aunque ahora no sea su mejor momento, alguien que escribe: «Escribo porque olvido / y alguien lee porque no evoca de manera / suficiente» ya tiene todos mis respetos (aquí, por cierto, la entrevista que le hice hace unos 8 años: http://revista.consumer.es/web/es/20050701/entrevista/)
Wislawa Szymborska: Enorme. Poco más se puede decir, es el gran referente de muchos de mis amigos poetas (hombres y mujeres). Aquí un poema suyo: http://www.editoraconcarrito.com/2010/03/la-feria-de-los-milagros-wislawa-szymborska/ en el que están unos de mis versos preferidos: «Un milagro cualquiera: / las vacas son vacas.»
Por Sardiflor, el 30 agosto 2013
Editorísisima!
Muchas gracias por tus ganas de compartir y reflexionar juntas. Maravillosas las escritoras que mencionas, eso no hace falta ni decirlo. La Gopegui me fascina personalmente. Pero no creo que en mis entregas he de revelar lo que me gusta a mí personalmente, no soy consejera librera. Cada entrega depende del tema y del destinatario y de las circunstancias. No es una plataforma sardifloreada 😉
Realmente pensé que la presentación de autoras con personajes femeninos fuertes quedaba tan claro que no hacía falta incidir más en ello. Lo menciono en el artículo, ese vínculo está expuesto. Así como señalo que no se trata de una lista, recalco también en ello. Además entre las autoras mencionadas hay un hilo argumental que las une en relación al comportamiento de sus personajes femeninos y a partir de ahí hay más de una conexión a descubrir que si bien no es evidente, requiere una lectura atenta. A veces los artículos pueden tener más de una lectura a medida que se observa. ¿Por qué no?
Como te comentara por tuiter cito poco, muy poco, a autores extranjeros y cuando lo hago es que no son tan conocidos. Esto es una opción personal que espero poder mantener, no lo afirmo al infinito. Estoy cansada de que los autores de nuestra cultura aparezcan poco. Las listas, las no listas, las citas, las no citas, la gran mayoría de artículos ya se ocupan de autores extranjeros en su mayoría porque son los mayormente editados. Ya sabes lo que se dice: que si es extranjero, pues vende más en España. No puedo imaginarme lo mismo en otras culturas, especialmente las anglosajonas que tanto se favorecen de nuestro espacio literario. Y es que se trata de algo que ocurre aquí, en Brasil y minoritariamente en Portugal y deja de contar. No se trata de que sea más patriota que nadie, para nada, no creo en patrias. Se trata de que creo que necesitamos nuestras voces y de que están poco valoradas. Personalmente creo que hay pocos espacios para noveles patrios, autores patrios, editoriales independientes. Tampoco se da lugar a ciertos aspectos de la edición que bien podrían ser tratados sin aburrir al personal. Para mí la cultura tiene que ver con todo y la forma en que nos narramos, pues más aún. La literatura y la cultura en general siempre está relacionada con la realidad en la cual vivimos. Creo que hay que recuperar esos lazos. Y como solamente puedo escribir sobre lo que creo y veo, pues eso es lo que hay. Mientras sirva, estaré. Cuando ya no sirva, no estaré. Personalmente espero que mis entregas sirvan de impulso para pensar, reflexionar o curiosear. No me interesan las reseñas, ni las críticas ni las listas. Ya hay demasiado crítico, demasiado reseñista. Me aburre tremendamente.
Muchas gracias por plantear cuestiones diferentes 🙂
Olas de besos
Por Editora con carrito, el 30 agosto 2013
Me he quedado dándole vueltas a la selección de autoras que has hecho y ¿puede ser que hayas primado a autoras con protagonistas mujeres en sus novelas? Si la cosa por ahí, me cuadra más que no hayas citado a la Matute, que es una de las mejores prosas que tenemos (por encima de la distinción hombre/mujer, al igual que la Gaite).
Por Sardiflor, el 30 agosto 2013
Exacto! Y además lo menciono en el artículo 😉 Y también hay otras razones, pero esa es una de las primordiales
Un abrazo de mares infnitos
Por Sardiflor, el 30 agosto 2013
Exacto! Y además lo menciono en el artículo 😉 Y también hay otras razones, pero esa es una de las primordiales
Un abrazo de mares infinitos