El jurado ha tenido trabajo. Este año le han llegado 42.000 imágenes de naturaleza procedentes de 96 países para participar en el concurso Wildlife Photographer of the Year, organizado desde hace 50 años por una de las instituciones más prestigiosas del mundo en el estudio de especies y espacios, el Museo de Historia Natural de Londres, junto con la cadena de televisión pública británica BBC. Las seleccionadas como 100 mejores pueden verse ahora en Madrid -hasta el 10 de enero-, en la sede del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid, con amplia presencia de autores y de paisajes españoles. Aquí repasamos una atractiva selección.
Tras la muestra en Londres, llega ahora a Madrid -y hacía mucho tiempo que no venía- esta interesante exposición que nos ayuda a comprender el valor de los fotógrafos de la naturaleza para concienciarnos de todo lo que está en juego cuando hablamos de la buena salud del planeta. Lo subrayó Juan Carlos del Olmo, director de la ONG ecologista WWF España, en la presentación de la muestra en puro centro de Madrid la semana pasada: «Necesitamos urgentemente concienciar y movilizar a la sociedad sobre todo lo que está en peligro. Y en ese sentido, la colaboración de los fotógrafos de naturaleza debe ser subrayada. Hemos de ver esta magnífica exposición como un homenaje y una reivindicación a la importancia de su trabajo; porque es una de las disciplinas más difíciles, por la perseverancia y conocimiento que exigen, y, sin embargo, no siempre es apreciada en su justo valor».
Hoy voy a escribir menos, porque sobre todo quiero que veáis estas maravillosas fotos de la edición de este año de Wildlife Photographer of the Year. Recorremos la exposición -una pena que la producción no haya dado de sí para ser más generosos con los formatos; se nos quedan pequeñas las copias- y nos encontramos con muchas aves y muchas formas abstractas compuestas por el barro, la hierba, la arena, el hielo, la nieve, los sedimentos de ríos; con ardillas, elefantes y primates, con la extraña y prehistórica presencia del pangolín. Nos encontramos con muchas instantáneas que han enfocado curiosidades del territorio español, como un túnel temporal formado por la nieve en Sierra Nevada, imagen captada por el italiano residente en España Ugo Mellone. Y con una impresionante imagen de zorros -la foto ganadora de esta edición, del canadiense Don Gutoski-, que sirve de alerta sobre el cambio climático: un zorro rojo con los despojos de un zorro ártico que le ha servido de festín; el zorro rojo y el zorro ártico rara vez interaccionaban en el pasado, pero, por el calentamiento global, se está ampliando la distribución del zorro rojo hacia el norte, convirtiéndose no sólo en el mayor competidor del zorro ártico -ambas especias tienen la misma dieta- sino que cada vez más el zorro rojo se está convirtiendo en el mayor depredador del zorro ártico, como muestra en toda su crudeza la fotografía gran ganadora. «Esta escena está llena de fuerza simbólica: el zorro rojo es cada vez más perdedor del zorro ártico como consecuencia del calentamiento global. Es la naturaleza, brutal, y sin embargo extrañamente bella. La gran fotografía de naturaleza combina el aprendizaje con la exploración y la búsqueda de la oportunidad, y esta imagen lo muestra perfectamente», ha destacado Lewis Blackwell, presidente del jurado. En la categoría juvenil, la fotografía ganadora es Exhibición de combatientes, del checo Ondrej Pelánek, una poderosa imagen del cortejo de estas aves, llamadas así, combatientes (Philomachus pugnax) en el norte de Noruega.
Entre los fotógrafos seleccionados abundan ingleses, estadounidenses, alemanes, italianos, holandeses, sudafricanos y españoles; entre éstos, nombres tan conocidos como Daniel Beltrá, José Antonio Martínez, Pere Soler y Francisco Mingorance. Nos divierte el ingenio de Juan Tapia. Nos agrada que también haya mujeres, en una parcela en la que tan poca presencia tienen aún (ahí están Marina Cano y Laura Albiac). Y hay otro nombre que nos llama especialmente la atención, el español Carlos Pérez Naval, niño prodigio en esta faceta, pues este año cuenta en la exposición con dos de sus fotografías en la categoría de menores de 10 años -una con abejarucos, y otra de una ardilla y una gaviota, frente a frente- y el año pasado fue premiado como el ganador absoluto entre los participantes de menos de 18 años, y recogió el premio de manos del famoso fotógrafo de naturaleza Frans Lanting, del célebre divulgador naturalista David Attenborough y de la duquesa de Cambridge, Kate Middleton.
Al fondo de la sala del Colegio de Arquitectos queda mi sección preferida, la de fotoperiodismo, con tiros de denuncia que se nos quedan grabados, como la imagen que muestra felinos drogados en un circo en Guilin (China), o la de un elefante encadenado en India o el reportaje sobre la caza ilegal de elefantes en África. Destacar una más, que nos revela la expresividad del pescado a través de un mercado de atún blanco y cómo los operarios proceden en masa a cortarles la cabeza.
Por cierto, WildLife Photographer of the Year ya ha puesto en marcha la siguiente convocatoria, la número 52, para participar entre enero y febrero de 2016 entrando en su web. Los premios son suculentos, pues aparte de la proyección que se da a fotografías y fotógrafos ganadores -eso sí, siempre han de ser tomas con animales salvajes, en esto son muy estrictos; no se admite trampa ni cartón, ni retoques de postproducción que alteren la esencia del trabajo-, reparten en premios en torno a 30.000 libras (más de 42.000 euros); de las cuales 10.000 (unos 14.000 euros) son para la imagen ganadora absoluta del año.
‘Wildlife Photographer of the Year’. Hasta el 10 de enero de 2016. En LASEDE del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (Hortaleza, 63). Entrada general: 4 €; reducida: 3 €; gratuita hasta 13 años.
‘Beber o no’. Carlos Perez Naval. España. Las gaviotas occidentales fueron monopolizando los platos de agua dulce colocados por los lugareños para una colonia de ardillas de tierra de California. Carlos estaba fascinado por la forma en la que las ardillas trataban de colarse para beber cuando las gaviotas no estaban mirando. Se las arregló para tomar esta imagen justo antes de que la gaviota se lanzara hacia delante y la ardilla huyera.
‘Liebre nival’. Rosamund Macfarlane. Reino Unido. Rosamund tardó dos años en conseguir fotografiar liebres de montaña en los Cairngorms, Escocia, «tan hermosas en sus abrigos de in-vierno y mostrando esa notable capacidad de resilencia». Después de varias horas tendida en el suelo, Rosamund captó esta liebre que estaba escarbando buscando comida debajo de la nieve, transmitiendo una sensación de determinación del animal en la adversidad.
‘El despertar de la garza blanca’. Zsolt Kudich. Hungría. Cuando el río Danubio se desbordó, este lago temporal atrajo a más de 1.000 garzas blancas. Durante cinco noches, Zsolt las fotografió bajo la suave luz del amanecer. Usando una velocidad de obturación lenta y gran profundidad de campo, capturó el momento en el que unos pigargos interrumpieron el pacífico festín de las garzas.
‘Komodo judo’. Andrey Gudkov. Rusia. Dos formidables dragones de Komodo luchan en la majestuosa costa del Parque Nacional de Komodo. Con un peso de hasta 150 kilogramos, con enormes garras y dientes de sierra, los dragones de Komodo se apoyan en sus patas traseras para luchar. En este caso era probable que fuera una disputa territorial. Andrey había ido muchas veces, con la esperanza de capturar las espectaculares peleas entre los machos durante la época de reproducción en verano. Después de varios intentos fallidos regresó en diciembre y fue testigo de esta batalla inesperada en una colina. ‘Fue un espectáculo inolvidable’, recuerda.
‘Desde las profundidades’. Fabien Michenet. Francia Por la noche, en el Océano Pacífico fascinantes criaturas ascienden desde las profundidades para alimentarse. Este ejemplar juvenil del pulpo, por ejemplo, tiene sólo dos centímetros de diámetro. «Uno de ellos se detuvo frente a mí», dice Fabien, «agitando elegantemente sus tentáculos». Con cuidado de no alterarle con un fuerte destello del flash, Fabien capturó el mundo oculto de este diminuto pulpo.
‘Paz escarpada’. Floris van Breugel. EEUU. «Fue una oportunidad única», dice Floris. La vista del Monte Fitz Roy, una catedral de granito imponente de 3.675 metros, estaba despejada. «El paisaje en sí era, por supuesto, espectacular. Sin embargo, fue la inclusión del ave lo que completó el disparo para mí». El atrapamoscas coliblanco contempla el tranquilo paisaje, aportando la sensación de escala.
‘El arte de la cigüeña’. Francisco Mingorance. España Esta torre es una escultura del artista alemán Wolf Vostell que incluye un avión ruso MiG-21, dos coches, pianos, monitores de ordenador y ahora tres enormes nidos construidos con palos y hierbas. Francisco utilizó una larga exposición para capturar estas parejas de cigüeñas blancas durmiendo bajo un cielo estrellado, en silencio, reivindicando su lugar en el mundo moderno que representó Vostell.
‘Marco natural’. Morkel Erasmus. Sudáfrica Mirando fuera del refugio subterráneo junto a una remota poza de agua, Morkel podía oír cada ruido, incluso sentir el olor de los elefantes. «Comienzas a mirar hacia fuera en esa fracción de segundo en la que el caos da paso al orden», dice. Este momento de Morkel se produjo cuando una elefante hembra enmarcó la imagen con sus patas, igual que su cría, que caminaba dentro del encuadre, enmarcaba a una jirafa.
‘El tiburón surfista’. Thomas P Peschak. Alemania /Sudáfrica Un curioso tiburón de punta negra se acerca furtivamente a un surfista. Este popular sitio de buceo es el lugar perfecto para probar un prototipo de tabla de surf con un elemento electromagnético disuasorio de tiburones. «Quería ilustrar un enfoque no mortífero para mitigar el conflicto entre tiburones y surfistas», explica Thomas, que utiliza formas complementarias en la imagen para sugerir la coexistencia pacífica.
‘Los cuidados del gorila’. Marcus Westberg. Suecia Ndeze, un gorila de montaña huérfano de nueve años de edad, observa cómo su acompañante femenina de 12 años de edad, Maisha, pasa su chequeo anual de salud por el experto en gorilas Eddy Kambale. Los cuatro gorilas de montaña del Centro Senkwekwe han sido rescatados de los cazadores furtivos y de los traficantes, después de haber sufrido experiencias traumáticas. «Los profundos lazos que existen entre estos huérfanos, sus cuidadores y Eddy es una de las cosas más conmovedoras que he tenido el privilegio de presenciar», dice Marcus.
‘La historia de dos zorros’. Don Gutoski. Canadá. Desde la distancia, Don pudo ver que el zorro rojo estaba persiguiendo algo en la nieve. Al acercarse, se dio cuenta de que la presa, ya fallecida, era un zorro ártico. Durante tres horas, a temperaturas de -30 grados, Don permaneció en el lugar hasta que el zorro rojo, finalmente saciado, recogió los restos del zorro ártico y los arrastró para guardarlos para otro momento. En la tundra canadiense, el calentamiento global está ampliando la distribución del zorro rojo hacia el norte, donde sus caminos se cruzan cada vez más con los de su pariente más pequeño, el zorro ártico.
Periodista convencido de que las luces al final del túnel solo se ven desde una perspectiva progresista de la realidad, con un compromiso sólido con la cultura, el arte y el medio ambiente, temas a los que ha dedicado la mayor parte del tiempo de su vida profesional -10 años en 'El País' y 15 años en 'El País Semanal'-. Autor de los libros de cuentos infantiles 'Toletis' y 'Ninoninoni', codirector de la galería madrileña Mad is Mad -centrada en artistas emergentes- y uno de los socios fundadores de la Asociación de Periodistas de Información Ambiental (APIA).
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Comentarios
Por Paula, el
18 noviembre 2015
Me gustaría recomendar el trabajo de ‘Animal Ethics’ sobre el deber moral que tenemos los humanos de ayudar a los animales en la naturaleza.
Creo que es muy positiva la intervención para ayudar a otros animales, teniendo en cuenta la magnitud del problema a la que se enfrentan millones de ellos. Ya no nos sirve quedarnos como meros espectadores.
Muchas gracias por el artículo. Sirve para ir despertando las conciencias.
Por Carlos Camilo Caamaño Cabrera, el
06 agosto 2016
Definitivamente me quedo con la del pulpo.
Se cuidaron todos los detalles y eso es muy valedero, aunque el fotógrafo no lo esperaba pero el pulpo posó para la cámara.
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Comentarios
Por Paula, el 18 noviembre 2015
Me gustaría recomendar el trabajo de ‘Animal Ethics’ sobre el deber moral que tenemos los humanos de ayudar a los animales en la naturaleza.
Creo que es muy positiva la intervención para ayudar a otros animales, teniendo en cuenta la magnitud del problema a la que se enfrentan millones de ellos. Ya no nos sirve quedarnos como meros espectadores.
Muchas gracias por el artículo. Sirve para ir despertando las conciencias.
Un abrazo de una compañera.
Por Joaquin Corbalan, el 19 noviembre 2015
Asombraido me he quedado! La del elefante es sin duda de las mas bellas.
Por Dinozze, el 20 diciembre 2015
Impresionantes, la del elefante muy buena, pero la del zorro es inédita.
Por Carlos Camilo Caamaño Cabrera, el 06 agosto 2016
Definitivamente me quedo con la del pulpo.
Se cuidaron todos los detalles y eso es muy valedero, aunque el fotógrafo no lo esperaba pero el pulpo posó para la cámara.
Por Mike, el 31 julio 2019
Espectaculares imagenes.