Marion Cotillard protagoniza una distópica ‘Juana de Arco’ en el Real
Una escena de ‘Juana de Arco en la hoguera’. Foto: Barbara Aumüller / Oper Frankfurt.
La actriz Marion Cotillard dará vida a Juana de Arco como protagonista del oratorio de Arthur Honegger que se estrenó en Basilea en 1938, un año antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial. El fundador de La Fura dels Baus, Àlex Ollé, firma la propuesta escénica que se desarrolla en un futuro distópico. El director de orquesta Juanjo Mena será el encargado de la dirección musical de este oratorio en el que será su estreno en el Teatro Real al frente de una producción operística escenificada.
Cuando Àlex Ollé, fundador de La Fura dels Baus, estrenó en la Opera de Frankfurt su versión del oratorio Juana de Arco en la hoguera, de Arthur Honegger, el público alemán la celebró con nada menos que 11 minutos de aplausos. Ahora esta propuesta –aumentada con La demoiselle élue (La doncella bienaventurada), de Debussy, a modo de preludio– llega al Teatro Real y, tal vez, con “más actualidad todavía” que hace ya un lustro en Alemania, según explicó ayer el director de escena catalán.
Aquellas funciones que se celebraron en Frankfurt estaban destinadas a ser protagonizadas por la actriz Marion Cotillard, pero tuvo que abandonar el proyecto por su embarazo. Ahora, cinco años más tarde, asegura que no se lo pensó ni un segundo cuando Ollé volvió a ofrecerle el papel. Es un personaje al que la actriz, ganadora de un Óscar por su interpretación de la cantante Edith Piaf en la película La vie en rose de Olivier Dahan, le tiene “un cariño especial” desde que lo interpretase por primera vez en 2005 en Orleans sustituyendo a su madre, la actriz Niseema Theillaud, según explicó ella misma ayer en el Real. “Juana de Arco es una mujer fuerte, que decidió seguir su destino, y eso la empujó a realizar cosas extraordinarias”, explicó Cotillard sobre su personaje. “Tenía una fe a prueba de cualquier desaliento y supo sobreponerse a todas las convenciones que ataban a las mujeres en su época. Ella se armó de una potencia y una fuerza extraordinarias. Y fue acusada de brujería, pese a que todo lo que pudieron esgrimir contra ella finalmente fue que se vestía como un hombre».
El oratorio de Honegger se estrenó en España en 1954 en el Liceu de Barcelona, con Ingrid Bergman en el papel protagonista y Roberto Rossellini como director de escena. El tándem Cotillard-Ollé promete emociones fuertes sobre el escenario del Teatro Real. “Es una obra que rezuma desasosiego e incertidumbre, y que está de rabiosa actualidad puesto que reflexiona sobre la condición humana”, explicó el director de escena, que ha situado su propuesta en un “futuro distópico”. Inmersos como estamos en una inquietante guerra como es el ataque de Rusia a Ucrania, con una pandemia todavía en marcha generada por un maltrato absoluto al medioambiente, con una polarización política que se extiende por todo Occidente como la pólvora, con el ascenso imparable de las propuestas extremistas basadas en el odio y la violencia…, Ollé se hace dos preguntas que informan toda su puesta en escena: “¿Nos dirigimos sin remedio a una nueva Edad Media? ¿Es que la Humanidad no va a aprender nunca de sus errores?”.
De izquierda a derecha, el director musical Juanjo Mena, la actriz Marion Cotillard y el director de escena Álex Ollé. Foto: Javier del Real.
El propio Ollé confesó que al recibir el encargo le pidieron que pusiera la obra de Honegger en diálogo con otra partitura, en principio por una cuestión de duración del espectáculo. Al escuchar La demoiselle élue, de Debussy, tuvo claro que había encontrado ese prólogo que necesitaba. “Las protagonistas de ambas obras están en una situación de transición entre el cuerpo y el alma”. De esta manera, todo el montaje se concibe como un espacio mental de la propia Juana de Arco y la escenografía se ha dividido entre la luz y la oscuridad. Entre el cielo y el infierno. En una propuesta que el propio Ollé calificó de “espectacular”, creada por Alfons Flores. Un suelo de cristal divide horizontalmente el escenario en dos, reproduciendo así las dicotomías dramatúrgicas.
El director musical será Juanjo Mena, que hará su debut en el Teatro Real con esta partitura que calificó como “una obra global muy difícil de gestionar y que abrió puertas a unas estructuras musicales desconocidas hasta el momento”. Tanto Mena como Ollé quisieron poner en valor al coro del Teatro Real, que tendrá un protagonismo absoluto durante las ocho funciones que se ofrezcan de esta “antiópera”, como la definió el director artístico del Real, Joan Matabosch. “La presencia del coro es impresionante y realizan un trabajo impresionante con una música que desde luego no es muy fácil de memorizar”, explicó Mena. Por su parte, Ollé calificó el trabajo del coro como “excepcional”. “Es una auténtica gozada trabajar con estos cantantes; son capaces de cantar con una gran calidad, haciendo todo lo que les hago hacer. Son increíbles. Les pides lo que quieras y ellos te lo hacen”, aseguró el director de escena.
La cantata de Claude Debussy, con reminiscencias de los pasajes más transcendentes y etéreos de Richard Wagner, será protagonizada por la soprano Camilla Tilling, la mezzosoprano Enkelejda Shkosa y un coro de voces femeninas que cantan fragmentos del poema simbolista The Blessed Damozel, de Dante Gabriel Rossetti. Juana de Arco en la hoguera está protagonizada por Marion Cotillard, junto al actor Sébastien Dutrieux (Fray Dominique), las sopranos Sylvia Schwartz (La virgen) y Elena Copons (Marguerite), la mezzosoprano Enkelejda Shkoza (Catherine), el tenor Charles Workman (Porcus), el bajo-barítono Torben Jügens (Heraldo), el Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real y los Pequeños Cantores de la JORCAM.
Puedes consultar aquí las fechas de las funciones de este espectáculo en el Teatro Real.
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