‘Olivares Vivos’: por un aceite con lechuzas, cernícalos, flores y abejas
La ONG SEO-BirdLife ha presentado recientemente los resultados de uno de sus proyectos estrella: el programa LIFE Olivares Vivos, llevado a cabo junto a la Universidad de Jaén y el CSIC, “que ha venido a demostrar que el modelo de olivicultura sostenible que propugna funciona”. “En solo tres años hemos comprobado que genera una recuperación de especies y un aumento muy significativo de la abundancia de flora y fauna. Además, es rentable: no disminuye la productividad, supone un ahorro en fertilizantes y fitosanitarios y proporciona un valor añadido a sus producciones”. Sepamos más de este ‘win-win’ de olivares y naturaleza.
“Tras tres años de medidas agroambientales en los olivares que en 2016 iniciaron la reconversión a Olivares Vivos, se han recopilado 339.288 registros de flora y fauna, 83.446 registros más que en el muestreo previo a la aplicación del programa (un 30% más). El número de especies de aves, hormigas, abejas y plantas se ha incrementado entre el 7% y 12%, y su abundancia aumentó en un 40% respecto a los olivares control”, destacan las conclusiones del proyecto.
Asunción Ruiz, directora ejecutiva de SEO-BirdLife, señala: “En los últimos años estábamos perdiendo el 20% de la riqueza ornitológica de nuestro campo y empobreciendo nuestro sector rural, empobreciendo a nuestros agricultores. Necesitábamos otra manera de producir alimentos. Nuestros campos se estaban quedando en silencio. Y necesitábamos demostrar que la agricultura es parte del problema, pero también es parte de la solución. Y ahora estamos en el momento de demostrarlo, pues se está diseñando una nueva PAC (Política Agrícola Común), que debe poner el acento en los agricultores que lo hacen bien, que cuidan la salud”. “Olivares Vivos se puede presentar como un referente en las políticas y estrategias recogidas en el Green Deal o Pacto Verde Europeo. Es un ejemplo de cómo ‘traer la naturaleza de vuelta a las tierras agrícolas’, uno de los principales objetivos de la Estrategia de Biodiversidad para 2030; integra la filosofía de la estrategia ‘De la Granja a la Mesa’ (conectando productores y consumidores); la de adaptación al cambio climático (secuestran el doble de carbono que los olivares con suelos desnudos); la Iniciativa de la UE sobre los polinizadores, los objetivos de reducción de agroquímicos y, sin duda, ha sido un excelente campo de pruebas para inspirar el logro de los objetivos ambientales de la nueva PAC”.
Muestreos en 40 olivares
Explicamos con más detalle el proyecto: Investigadores de la Universidad de Jaén y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), socios de este proyecto LIFE, han medido la biodiversidad en 40 olivares andaluces (20 demostrativos, con una extensión de más de 3.600 hectáreas, y 20 control o espejo) de muy diversa tipología: unos de gestión intensiva, otros extensivos, unos más grandes, otros más pequeños, unos en paisajes más complejos, otros en entornos de monocultivo de olivar. Se actuó sobre 20, y a cada uno de esos 20 le correspondía otro gemelo, de similares características (olivar espejo), pero sobre el que no se actuaba, para, al final de esos tres años, medir qué había pasado en el olivar demostrativo y qué había pasado en el otro olivar gemelo.
Sus conclusiones: “Los resultados avalan la efectividad del modelo Olivares Vivos y refrendan la importancia del olivar para la conservación de la biodiversidad en Europa. En los olivares que en 2016 iniciaron la reconversión a Olivares Vivos, el número de especies de los grupos estudiados (aves, hormigas, abejas y plantas) se incrementó entre el 7% y el 12% y su abundancia aumentó en un 40% respecto a los olivares control. La modelización a partir del análisis de todos los resultados de biodiversidad recogidos en este proyecto LIFE indica que esta recuperación, alcanzada en sólo tres años, podría llegar a medio plazo hasta el 35%. Estas cifras nos dan una idea del extraordinario impacto en la conservación de la biodiversidad que tendría la extensión y popularización de este nuevo modelo de olivicultura”. Recupera biodiversidad con buenas prácticas de gestión sin perder rentabilidad, sino incluso todo lo contrario. Ese es el quid de la cuestión.
Recuperar las cubiertas herbáceas
José Eugenio Gutiérrez, coordinador de Olivares Vivos, nos explica en qué consisten las actuaciones del programa: “Una vez determinada la biodiversidad de partida, en cada uno de los 20 olivares demostrativos se pusieron en marcha los planes de actuación para cada finca, de acuerdo con los esquemas agroambientales de Olivares Vivos: mantenimiento y gestión de cubiertas herbáceas, restauración de las zonas improductivas del olivar (cárcavas, arroyos, linderos, bordes de caminos, etc.) mediante plantaciones con especies autóctonas e instalación de infraestructura de soporte para la nidificación y el refugio para la fauna (charcas y bebederos, muretes, cajas y postes nidos, nidales de insectos…)”.
“Tras este análisis, se ha podido concluir que, finalizada la reconversión de estos 20 olivares al modelo Olivares Vivos, se han incorporado, de promedio, cerca de una treintena de especies por olivar considerando todos los grupos estudiados. Una recuperación que ha sido mucho mayor en los olivares que partían de un peor estado de conservación (suelos desnudos y ausencia de vegetación natural, la foto-fija más frecuente). En estos olivares, sin considerar las especies leñosas introducidas por reforestación, la recuperación de especies superó el 12% y la abundancia se incrementó en un 70%”, según detalla Pedro Rey, catedrático de Ecología de la Universidad de Jaén y responsable del equipo de investigación que participa como socio en este Proyecto LIFE.
Esta recuperación de especies se produjo en todos los grupos indicadores estudiados excepto en las hormigas. Las aves experimentaron una recuperación generalizada en todo tipo de olivares, encontrando una media de 3 especies más (algo más de un 5% de incremento) por olivar tras las actuaciones. Por su parte, las abejas silvestres, un grupo de máximo interés ecológico por su papel en la polinización de plantas silvestres y cultivos, y que se enfrenta a problemas de conservación en todo el mundo, se incrementaron en los olivares vivos en una media de 25 especies. Esto supuso un incremento medio del 16%. Esta vez, el incremento fue mayor en los olivares que ya manejaban cubierta herbácea (hasta el 24,5%, frente al 7,5% en los que partían de suelos desnudos), lo que indica que, además de gestionar adecuadamente las cubiertas herbáceas, es fundamental la restauración vegetal de las zonas improductivas. Respecto a la flora, se detectaron tras las actuaciones un total de 58 especies no registradas previamente, un incremento promedio de especies de más del 14%, que superó el 30% en los olivares que partían de una situación con suelos más deteriorados”.
Y la rentabilidad, ¿qué?
Pero la ONG va más allá, y se pregunta: “Que la olivicultura de Olivares Vivos recupera biodiversidad ya es un hecho contrastado científicamente, pero ¿es rentable? La hipótesis de partida era que la recuperación de biodiversidad se transforma en rentabilidad a partir de tres vías principales: El ahorro de insumos, el pago por servicios ambientales y el valor añadido de sus producciones. El ahorro de insumos debe producirse por el aumento de servicios ecosistémicos, es decir, por los servicios que presta la biodiversidad, por ejemplo, conservando y mejorando la fertilidad del suelo o controlando de forma natural plagas y enfermedades. El esquema de certificación de Olivares Vivos no restringe el uso de agroquímicos más allá de evitar el abuso y las malas prácticas (entre otras cosas, porque este abuso impediría el incremento de la biodiversidad). Sin embargo, el simple hecho de hacer un uso racional de estos insumos y comprobar que en muchos casos ya no son necesarios, hizo que el uso de agroquímicos se haya reducido en los olivares demostrativos durante el proyecto LIFE en un promedio del 22%. En cuanto al pago por servicios ambientales, la PAC cada vez está más ligada a la compensación económica por estos servicios y, en este sentido, está claro que los olivares vivos estarán mucho mejor posicionados para recibir las ayudas de la PAC”.
Según Marifé Bruque, olivarera participante en este LIFE, “la conversión a olivares vivos no representa ninguna merma en la productividad de la plantación –en mi caso, se ha incrementado– y supone un ahorro en agroquímicos. Pero lo más importante es la sensación de haber mejorado nuestra forma de cultivar la tierra y el valor añadido de la biodiversidad, que nos está permitiendo incrementar el precio de la aceituna a través del aumento de la demanda de los aceites de oliva virgen extra (AOVE) obtenidos de nuestro olivar”. Y termina: “El olivar comprometido con la naturaleza es futuro y un futuro rentable”.
Aceites con el sello de calidad
“Para trasladar el valor añadido de la biodiversidad a los AOVE”, explican en SEO-BirdLife, se está poniendo a punto el esquema de certificación del sello Olivares Vivos, que garantizará al consumidor que el AOVE con este sello se ha producido en olivares en donde se han recuperado especies de flora y fauna. Por el momento, solo lo llevan los AOVE producidos en los olivares demostrativos del proyecto LIFE pero, a partir de este verano, cualquier olivicultor podrá iniciar el proceso de certificación en Olivares Vivos. De hecho, ya hay más de 600 olivicultores interesados en la certificación de sus olivares”. Y concluyen: “Ahora, sólo falta que los consumidores apoyen esta nueva forma de olivicultura con sus decisiones de compra”.
COMPROMETIDA CON EL MEDIO AMBIENTE, HACE SOSTENIBLE ‘EL ASOMBRARIO’.
Comentarios
Por Alfonso, el 10 abril 2021
Buenas noches leído el artículo estoy de acuerdo en todo,pero la ciudadanía No.
Siempre pongo el siguiente símil dos amigos van a opositar,por la misma carrera y ocurre que uno saca de nota un seis y el otro un diez y le dan la plaza al que saca el seis y al otro lo echan a su casa,eso es lo que ocurre en España con el aceite extra y el lampante,llevo en La Agricultura 47 años y me quedo anonado y esa es la realidad,con las barredora se cogen muchos kgrs y con los mantones a principio de noviembre la mitad por persona y haciendo mis cálculos dividiendo sus kgrs entre dos,por el abarato en la recolección y s.sociales.Les sale el lampante a cinco euros,yo aunque saque máxima calidad entre nueve y nueve treinta de calidad,lo mío no es reconocido,por lo cual tampoco es rentable,en Italia sí existe ese reconocimiento.
Un saludo Alfonso
Por Jose Manuel Alonso, el 12 abril 2021
Es una maravilla de artículo, gracias por ese trabajo tan importante de investigación y desarrollo. Es el principio del camino, ya se está iniciando el cambio en las mente poco a poco, si seguimos difundiendo cada info que tenemos a nuestro alrededor ayudará a que se confíe y se valla poco a poco corroborando y defendiendo ent d masociedad más abierta al cambio.
Por Necesitamos más olivares reconciliados con la vida, el 15 julio 2024
[…] 2021 la Comisión Europea aprobó continuar el proyecto con ‘Olivares Vivos+’ hasta 2026. El modelo desarrollado en España se ha estudiado ahora en Italia, Grecia y […]