‘Olot’, un inquietante ‘Twin Peaks’ a la catalana
Dos páginas del cómic ‘Olot’, de Dr Alderete.
En Olot pasan cosas diferentes. No en el día a día, sino en los mitos historias y leyendas que aguardan el momento de ser contadas por la memoria colectiva. Una suerte de visita guiada por la ciudad es lo que el conocido dibujante y escritor argentino afincado en México Jorge Alderete ha hecho con ‘Olot’ (Autsaider Comics, 2022). La historia, que formalmente nace en 2019, comienza décadas atrás, justo cuando los sucesos más extraños encuentran su espacio en el municipio. Esta novela gráfica recoge la famosa ‘cosmogonía’ de la localidad catalana; en ella, el autor mezcla ovnis y extraterrestres, crímenes en serie y secuestros (la farmacéutica secuestrada, ‘el ángel de la muerte’ del geriátrico), volcanes y sexo telepático. En fin, un ‘Twin Peaks’ a la catalana.
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“Es ciencia ficción, pero hay algo de realidad en ella. Según la fui componiendo, me di cuenta de que habla de la monotonía, lo cotidiano, las cosas repetidas, algo muy relacionado con el momento que vivíamos de la pandemia durante el confinamiento”, adelanta el artista.
El escenario elegido por Alderete, que firma como Dr Alderete, no es baladí: “Yo ya conocía Olot y todas las historias que se contaban ahí. Por más fantástico que fuera lo que yo quería transmitir, al situarse en un territorio en el que han ocurrido tantas cosas podía haber sido otra de esas historias reales que lo rodean”. Es decir, Olot es un lugar tan surreal y extraño que cualquier historia irreal podría pasar por verosímil.
El hilo narrativo que ha creado Alderete imbrica con las novelas de misterio al uso, aunque ésta perfectamente ilustrada. “La historia transcurre a lo largo de muchos años de la vida de un personaje, muchos años de repetición y monotonía”, incide. Pero la sucesión quizá repetitiva de los acontecimientos disputa con el ir y venir de otras subtramas que aluden a acontecimientos más o menos reales contados de forma más o menos real que circundan la realidad de Olot.
Contarlo sin caer en el morbo fue uno de los retos a los que se enfrentó Alderete. Al fin y al cabo, era muy fácil dejarse llevar por la curiosidad que brota de la forma más escabrosa. Y lo consigue, porque Olot no es solo una novela de misterio, sino un mapeo de la ciudad homónima, una descripción fisionómica del enclave. “Tenía que tener mucho cuidado, porque yo me podía apoyar mucho en el aspecto paranormal de los relatos, en ese halo de misterio que tienen, pero son historias que le sucedieron a gente que todavía está viva”.
La forma elegida por este artista argentino para transmitir su pequeña criatura marida a la perfección con su contenido. “Hacer una novela gráfica era algo pendiente que tenía por hacer. Esta es la primera novela gráfica que escribo y dibujo íntegramente”, dice a El Asombrario. De esta forma, Alderete encuentra cierta facilidad para mostrar, de una vez por todas, sus propias inquietudes en una obra escrita y dibujada por él mismo.
El estilo del trazo de los dibujos es característico del autor. Lo tiene tan interiorizado que ya ni se da cuenta de ello, admite. “Intento explotar mis limitaciones. La cuestión gráfica tiene mucho que ver con dónde me siento yo cómodo”. Por eso, a través de los años, Alderete ha conseguido inmiscuirse en la psicología del color que ahora transmite al detalle.
“Esta historia que se desarrolla durante tantos años transcurre en blanco y negro. Las otras historias que guardan relación con lo documental y los casos que existieron en Olot, en color”, desarrolla el artista. Así, el color se balancea entre la irrealidad que siempre queda en duda. Es un color psicodélico, estridente, que justamente es utilizado para contar aquellos hechos de los que sí hay pruebas, que levitan en el imaginario colectivo.
Olot es, de esta forma, un juego continuo con la distorsión y la ficción. El lector conocerá mejor este municipio de Girona, en una Catalunya que siempre mira con ojos de estupefacción hacia Olot. Así pues, llega la consagración de Alderete como ilustrador, pero también escritor. Una novela gráfica que no es otra más. Una novela gráfica que en la que lo real y lo ficticio se difuminan para que la imaginación abra una ventana de aire fresco en cada uno de sus lectores.
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