Peludos guapos: Siete trucos para cuidar el pelo de tu perro o gato
Antes peludo que sencillo. Pero, ¿cómo cuidar el pelo de perros y gatos en casa? Aquí tienes siete trucos divertidos y hasta sabrosos para conseguirlo. ¿Algunas ideas? Elige bien los cepillos, aprende cómo y cuándo es el momento de usarlos, no descuides los preliminares (antes del cepillado) y haz que tu amigo se relama los bigotes y hasta los morros mientras cuida de su pelo.
El mal tiempo multiplica las ganas de compartir achuchones y sofá con la bola de pelo con la que vives. Y, admitámoslo de una vez por todas, también el colchón: ¿sabías que tres de cada cinco personas que vivimos con un perro o gato dormimos con él? Son los resultados de un estudio reciente del Centro de la Medicina del Sueño de Estados Unidos.
Estos abrazos peludos son más agradables si tu amigo de cuatro patas está limpio. No sólo eso: gatos y perros necesitan nuestra ayuda para cuidar su pelo, mantener su piel sana y estar tan perruna y gatunamente guapos como merecen. Pero, ¿por dónde empezar?
Humano: necesito un cepillado
¿Tu perro se ha transformado en una croqueta peluda que rueda sobre la alfombra del salón? Este simpático gesto canino, además de gustoso, es una forma muy perruna de mantenerse limpio, y su forma de decirte: «Humano, necesito un cepillado urgente». El pelo de los canes atrapa mucha suciedad e incómodos restos de hierbas en sus paseos por el parque.
El minino con el que compartes la vida no se queda atrás. Aunque más que de croquetas, los felinos son de técnicas de limpieza ninja, por sutiles y eficaces. ¿Sabías que los mininos dedican unas ocho horas diarias a mantener su pelo limpio? El gato cuenta con un aliado eficaz en esta tarea: su precisa y espinosa lengua. Un arma cuya eficacia envidiaría el guerrero más aventajado.
No obstante, hasta el ninja más ronroneante necesita ayuda. «Gatos y perros requieren cepillados habituales para mantener su pelo sano, retirar los restos de suciedad atrapados y eliminar los pelos muertos; un mecanismo esencial para airear la piel y mantener en forma esta importante barrera natural del animal», explica la veterinaria Patricia González. En los gatos, además, el cepillado es un seguro de vida contra las bolas de pelo que se forman en su estómago.
¿Qué cepillo uso para mi perro o gato?
El cepillo adecuado para tu amigo de cuatro patas depende de su tamaño y pelaje. Los gatos y perros de pelo largo necesitan cuidados diarios con un cepillo de púas largas y rígidas que penetren bien en su manto. Y un peine de púas anchas contra los enredos. ¿Un truco purrrfecto contra los nudos más difíciles? Prueba a deshacerlos con ayuda de aerosoles de peluquería felina o canina. ¡Pregunta a tu veterinario!
Los canes y felinos de pelo corto se arreglan bien con uno o dos cepillados a la semana. Los cepillos de goma, tipo guante, te ayudan además a retirar buena parte del polvo y suciedad atrapados. Después, usa un cepillo suave y otro de púas metálicas para atrapar los pelos muertos. «Los cepillos de púas metálicas arrastran más pelo, por lo que son esenciales para completar el aseo de perros y gatos y mantener su pelaje sano», explica González.
Mandamiento peludo antes de lanzarte a cepillar a tu amigo: reúne todo lo que necesitas antes de empezar. ¡Así evitas tener que salir corriendo en mitad de la tarea para ir a buscar un cepillo!
Aquí tienes más trucos para cepillar al gato, ¡y que le guste! (aptos también para amigos perrunos).
Ronroneos y ladridos de placer peludo
¿Preparados para un tropel de ronroneos mientras pasas el cepillo? ¿Quieres ver a tu perro ladrar de pura felicidad peluda cuando usas el guante de goma atrapapelos sobre su cuerpo? El cepillado debe ser un momento divertido y una excusa para mimar a tu bola de pelo. ¡Olvídate de torturas peludas! Para lograrlo, cuida los preliminares. Mima con caricias diarias a tu amigo perruno o gatuno, aunque no vayas a cepillarle. Esto logrará que tu bola de pelo se encuentre más cómoda cuando llegue la hora de coger el peine. Lo ideal es hacer del cepillado una extensión de las caricias: ¡queda prohibido el cepillado machacón! Alterna palabras cariñosas y masajes en cabeza y detrás de las orejas. ¿Quién no se derretiría y plantaría panza arriba con este despliegue de amor humano?
El secreto que tu perro quiere que sepas
El secreto para retirar el mayor número de pelos muertos es comenzar con un breve cepillado en el sentido contrario al pelaje, es decir, desde la cola hacia la cabeza. Este movimiento ayuda a movilizar los pelos sueltos, y hace más fácil atraparlos después con el cepillo metálico.
¿Quieres evitar que matojos peludos rodantes ocupen el salón y lo transformen en el escenario de un western perruno? Coloca a tu amigo sobre una toalla: es barato, no deja escapar mechones que se liberan durante el cepillado y es fácil de lavar. Un truco para que el pelo brille más: haz la última pasada con una gamuza o tela de ante.
Baños contra los enredos peludos
Si toca baño en casa, recuérdalo: el cepillado del perro debe ser antes y no después. «El pelo mojado del can es más propenso a enredarse y formar nudos que el seco, por eso hay que cepillarlo siempre antes del baño», dice la veterinaria.
Un truco para evitar los resbalones en la bañera es colocar una alfombrilla de goma o toalla en el fondo: impedirá los patinazos (y sustos) de tu amigo de cuatro patas. Y no olvides que perros y gatos necesitan un jabón específico; nunca uses el tuyo, ya que le irritarás la piel porque su PH es distinto. Los gatos que no salen al exterior no necesitan baños periódicos con agua y jabón, excepto casos excepcionales.
Comida para perros y gatos guapos, ¡y con pelo sano!
El pelo de perros y gatos necesita hidratarse para estar sano y brillante. Y aquí es importante la alimentación de tu saco de mimos. ¿Sabías que algunas comidas light eliminan no sólo algunas calorías sino también las grasas buenas como los ácidos grasos omega 3 y 6? El resultado es un pelo felino o perruno sin brillo y casposo, falto de hidratación. Si notas que el pelo de tu amigo de cuatro patas está apagado, consulta con el veterinario, ya que hay alimentos como el salmón o el atún que pueden ayudarle.
Otra opción socorrida, y que le hará relamerse morros y bigotes, es utilizar el aceite de las sardinas enlatadas, siempre que no sean picantes ni estén aderezadas. Este alimento es una fuente importante de omega 3 y 6, y podemos añadir una cucharadita a su comida una vez a la semana.
Pelos a cambio de amor, ¿aceptas?
Perros y gatos son… ¡peludos! Y esto implica que tu saco de mimos es una fuente de hebras inagotable, capaz de competir con el dispensador peludo más sofisticado. Los cepillados son esenciales pero, aceptémoslo, nunca acabarán con todos los mechones que viven en tu sofá.
Quienes amamos a perros y gatos lo sabemos, y aceptamos la derrota peluda con dignidad. Esos ojos caninos llenos de amor y esos masajes felinos que arrancar tu mejor sonrisa hacen que merezca la pena. El amor peludo tiene estas cosas: o se toma o se deja.
Comentarios