Un viernes de cine

Nos detenemos en una obra magistral, 'Dublineses'; el legado melancólico perfecto de un maestro, John Huston.

¡Estamos en 'El Gran Carnaval!'! Sensacionalismo, espectáculo mediático. La magistral cinta de Billy Wilder, de 1951, cínica con la ambición, con la ética personal, con la moral colectiva, con la gloria periodística y con el poder, no ha envejecido nada.

R. W. Fassbinder habría cumplido este año los 70, pero murió con sólo 37. Aun así le dio tiempo a dejar varias decenas de películas, algunas que nos conmueven profundamente hoy por su lucha contra los miedos y los prejuicios.

Hoy revisitamos a alguien imprescindible, iconoclasta y perturbador: Pier Paolo Pasolini, asesinado hace ahora 40 años, y su 'Mamma Roma', sobre una prostituta que persigue una vida mejor para su hijo adolescente.

Jean-Luc Godard conecta en 'El desprecio' (1963) el devenir cinematográfico y las relaciones personales; la pérdida artística inclinada inevitablemente hacia la industria y el puro negocio.

Luchino Visconti nos sitúa en 'La caída de los dioses' ante la decadencia de la naturaleza humana. La perversidad manipuladora, la ambición y la destrucción de unos personajes tan apegados al poder y al dinero.

Hoy nos detenemos en ‘Un condenado a muerte se ha escapado’, una obra maestra del subgénero de ‘cine carcelario’ rodada por Robert Bresson en 1956 y que muestra que la fe en la libertad reside, sobre todo, en la confianza en uno mismo… Y en el otro. Libertad, una palabra, un concepto, tan hermoso como […]

Profundamente humana, 'Lamerica', dirigida en 1994 por Gianni Amelio, apela a la memoria de todos aquellos que hemos olvidado la historia, las vivencias y pesares de inmigrantes y refugiados.

Hemos entrado en 'Suspense', 'The Innocents' en su título original, un clásico del terror que, a pesar del calor, les dejará helados. El responsable: Jack Clayton.

Nada mejor para estas fechas y temperaturas que esta película de Lawrence Kasdan, 'Fuego en el cuerpo', que marcó todo un estilo en los primeros ochenta. Unos fogosos y soberbios William Hurt y Kathleen Turner construyen, a golpe de saxo y sexo, una extraordinaria historia de cine negro.