Years & Years’. El futuro inmediato: la dictadura sostenida por el rebaño
El futuro ya está aquí y no son buenos tiempos para la confianza. La nueva distopía, concebida por la serie de la BBC Years & Years, es un viaje salvaje hacia los próximos 15 años. Un drama compulsivo que pretende comunicar el riesgo al que nos enfrentamos en un futuro tan próximo que casi sorprende angustiosamente, al caer en la cuenta de que está gestado desde nuestro presente, con los ojos velados frente a nuestro pasado. El poder cada vez más dictatorial sostenido por el rebaño.
Years & Years pone el énfasis en el día a día, o más bien año a año, de los Lyon, una familia inglesa que mantiene la conciencia social como uno de sus valores más apreciados, y que se pregunta, no sin ansiedad, en qué clase de mundo estamos y en “¿cómo será nuestra vida dentro de cinco años?”. Pronto van a comprobarlo, demasiado pronto.
Durante los primeros minutos de Years & Years seguimos la rutina de esta familia contemporánea, liberal, cordial, abierta, interracial y en la que conviven sin problemas diferentes condiciones sexuales. Como un drama doméstico convencional en el que sus personajes intentan sobrevivir en una sociedad cada vez más avanzada tecnológicamente y a la vez más atrasada humanamente. Un mundo progresivamente problemático e incomprensible. Un mundo confuso, enredado entre la libertad que concede el progreso y la servidumbre a la que puede arrastrarnos en manos de los de siempre.
El poder por el poder sostenido por el rebaño.
Las actitudes y los deseos de los Lyon se desarrollan entre lo íntimo y lo hazañoso, lo individual y lo político, bajo diferentes perspectivas no enfrentadas, nunca lejos de un punto común al cual aferrarse para mantener el equilibrio entre lo familiar y el mundo exterior. Pero el débil equilibrio queda perplejamente desconcertado el día en el que una semidesconocida, Vivienne Rook, aparece en un debate de televisión sorprendiendo a la nación al declarar en un turno de preguntas: «Cuando se trata de Israel y Palestina, supongo que me come el C…». Y el mundo comienza a andar así durante 15 años.
Vivienne Rook (Emma Thompson, lo mejor de la serie, para mí la más grande de su generación), junto a la brillante y ágil abuela Muriel (interpretada por la maravillosa Anne Reid), aparece, menos en una sola secuencia, sumergida en las pantallas de televisión, como cualquier otro ente político de nuestros días, escupiendo todo tipo de basura nacionalista y populista, esa misma que empezamos a escuchar más y más cada día en la realidad. Poco a poco, sin pausa, irá conquistando las mentes poco inspiradas y alienadas de una sociedad que tiende a aislarse una y otra vez de la culpa individual y que ha de llevarla, si no pone freno, hasta los parámetros de dirigentes como Rook, envueltos en esa propaganda acorraladora, ya inventada hace 80 años, que llevó a nuestros abuelos al desastre y de la que parece ser que ni nuestros padres ni nosotros hemos conseguido aprender.
El mensaje, o el extraño sabor que deja en el espectador, la posibilidad tan probable de que la distopía puede convertirse en realidad, es quizás lo mejor, o al menos lo verdaderamente interesante, de Years & Years. El brillante montaje que marca el paso del tiempo haciendo coincidir los nacimientos, matrimonios, muertes (incluidas la reina Isabel II y Angela Merkel), con temas tan increíblemente posibles como la reelección del presidente Donald Trump, la destrucción de la unión en Europa, la impulsión de los regionalismos, la xenofobia… Ciudades -en este caso representadas en Londres- donde la desigualdad se ha agrandado, donde las zonas ricas se han cercado y donde solo las personas que han sido sometidas a una prueba de recursos tienen la posibilidad de disfrutarlas. Contra este telón de fondo, mientras la familia Lyon lucha o se deja llevar por la peregrina corriente, mientras la sociedad navega por un mundo inestable a causa de la política, la economía y los avances tecnológicos, la estrella política de Rook se eleva imparable. Ella y sus correligionarios, los bancos, las corporaciones y las noticias falsas, oscurecerán el mundo, desde el punto de vista moral, tecnológico y político.
No se depriman tan rápido, pues existe el humor en Years & Years, no sólo el temor y la incertidumbre. Hay también ciencia ficción y thriller, si bien con más o menos éxito en cuanto a su exposición. Es cierto, al menos a mi modo de ver, que cierta exageración en esos conceptos de género no hacen más que ensombrecer a veces el discurso brillante, perdiéndose a ratos puerilmente la mirada aguda en una realidad que no se encuentra mucho más allá de nuestra imaginación.
“Las mariposas se han extinguido”, un mundo que puede sonar remoto y que, sin embargo, está mucho más al alcance de la mano de lo que quisiéramos creer. Échenle un vistazo a Years & Years, quizá cierta angustia al vernos reflejados pueda hacernos reflexionar como a los Lyon. «Es como si la inteligencia estuviera retrocediendo». “La raza humana se está volviendo más estúpida ante nuestros ojos».
Comentarios
Por Nely García, el 12 julio 2019
Las distopías son retrocesos aberrantes y no acepto que el futuro nos depare ese supuesto. Los rebaños deben de evolucionar y las nuevas tecnologías donde todos pueden tener acceso quizás ayude, pero antes se debe de erradicar el hambre y todas las penurias añadidas. El anclarse en la resignación es el enemigo más potente para la evolución social.
Por Nely García, el 12 julio 2019
Las distopías son retrocesos aberrantes y no acepto que el futuro nos depare ese supuesto. Los rebaños deben de evolucionar y las nuevas tecnologías donde todos pueden tener acceso quizás ayuden, pero antes se debe de erradicar el hambre y todas las penurias añadidas. El anclarse en la resignación es el enemigo más potente para la evolución social.
Por Asanuma, el 13 julio 2019
Es una serie muy interesante que como bien se dice en el artículo nos invita a reflexionar sobre el futuro tan opaco y deshumanizado al que nos dirigimos -o nos están dirigiendo-. En nuestro mundo actual ya se persigue a quienes rescatan a seres humanos en el mar, a quienes denuncian la contaminación, el fracking, la deforestación o el maltrato animal: nuestro presente es ya una distopía que aún estamos a tiempo de poder cambiar.
La serie no es muy acertada en sus previsisones sobre España -el creador se habrá creído los telediarios de A3 oTelecinco- pero Emma Thompson está genial.
Por Olga, el 14 julio 2019
No la he visto, pero la buscaré de inmediato, el artículo me ha hecho querer descubrir todo lo que se dice de ella. Desde luego Emma Thompson es una de mis actrices preferidas,
El artículo me ha dejado con muchas ganas de descubrirla.