Umbra Light Festival, la luz convierte Vitoria en ‘La isla del tesoro’

La luna parece querer participar de la instalación Parallel Strata de Nicky Assmann y Joris Strijbos en Vitoria. Foto: Manuel Cuéllar.

El fin de semana del 14 al 16 de febrero Vitoria celebró la cuarta edición del Umbra Light Festival, a la que la revista ‘El Asombrario’ fue invitada. 21 instalaciones de luz repartidas por toda la ciudad en plazas, calles, catedrales, jardines y museos convirtieron la capital alavesa en un fabuloso y gigantesco museo gratuito con piezas de algunos de los mejores artistas de la luz del mundo.

No por redundante deja de ser verdad: sin luz no habría vida. Tal vez por eso y por todo lo misterioso que rodea a este elemento, se ha convertido desde hace ya décadas en uno de los materiales más exitosos para realizar esculturas o instalaciones artísticas basadas en ella. No olvidemos que las estrellas, el mar, el cielo y todo lo que vemos existe en cierta forma gracias a ella. Es lo primero que vemos al nacer y dicen que también nos espera en el momento de la muerte. Es fin y principio. Intangible y de una velocidad prodigiosa, la luz siempre nos infunde curiosidad, como si fuéramos polillas volando alrededor de una bombilla.

Grandes artistas como James Turrell o Dan Flavin tuvieron la idea de utilizarla y moldearla como si fuera el barro o el bronce que emplearon otros escultores decimonónicos, y sus trabajos han evolucionado en la mente de una legión de artistas hacia el espectáculo multimedia y la espectacularidad, en unos casos, y la serenidad en otros. Lo cierto es que el fin de semana del 14 a 16 de febrero se organizó en Vitoria la cuarta edición del Umbra Light Festival y la capital alavesa se convirtió en toda una isla del tesoro. Miles y miles de vitorianos y visitantes, armados con un mapa proporcionado por la organización, buscaron por toda la ciudad incansablemente los puntos en los que encontrar esos cofres relucientes y sorprendentes en forma de instalaciones de luz, en una especie gincana familiar y gratuita. Desde las 19.00 y hasta las 23.00 horas, horario en el que se podía visitar la mayoría de esculturas, el sábado 15 pudimos comprobar cómo una gran parte de la ciudad se volcaba con la propuesta, abarrotando plazas o esperando pacientemente en colas para aquellas instalaciones que se realizaron en interiores.

“En esta cuarta edición de Umbra Light Festival volvemos a incidir en la experiencia de caminar la ciudad y descubrir las 21 instalaciones de Light Art que se exhiben en 21 implantaciones, calles, plazas, catedrales, jardines, museos”, explica Carlos Torrijos, director de este certamen. “La Luz es capaz de unir a más de 120.000 personas durante los 3 días que dura el festival en tan solo 12 horas de desarrollo. Los visitantes redescubren la ciudad con otra mirada y el festival genera no solo entretenimiento visual, sino también posee una intención de ofrecerle a las personas que lo visitan un sentido de pensamiento social”.

El arte es Paz ha sido el lema de esta edición 2025. “La Luz hecha arte a través de las instalaciones que sus creadores han realizado es capaz de hacernos olvidar nuestras barreras ideológicas y unirnos para admirarlo y disfrutarlo”, concluye Torrijos.

Umbra Light Festival es, además, una cita que apuesta decididamente por la sostenibilidad y por eso pertenece, junto a otros 30 festivales de Europa, a la International Light Festivals Organisation, que en 2023 firmó un acuerdo para buscar fórmulas que hicieran a los festivales más comprometidos con la sostenibilidad del planeta. En esta edición de 2025, Umbra Light Festival ha dejado, por ejemplo, de imprimir el programa libro, más de 40.000 ejemplares de cerca de 20 páginas. El visitante de Umbra 2025 pudo guiarse e ilustrase con el programa que se conseguía en la Web del festival o bien a través de una nueva aplicación que el festival puso en marcha por primera vez.

Por otro lado, todas las lonas que se utilizaron en el festival son de textiles reciclables y no contienen referencias temporales para que puedan ser reutilizables en próximas ediciones. El 90% de las instalaciones artísticas se alimentaron con energías limpias y luminarias led que son reciclables para nuevas instalaciones y cuyo consumo es muy bajo. Además, durante el Umbra Light Festival se apagaron algunas plazas y calles de la ciudad para resaltar los trabajos de los artistas, provocando en este sentido cierto ahorro de energía.

Aquí os dejamos algunos ejemplos de las propuestas que más nos impactaron. Desde luego, Umbra Light Festival es una original forma de conocer una maravillosa ciudad como Vitoria o de redescubrirla desde un ángulo más luminoso.

Affinity. Foto: Manuel Cuéllar.

‘Affinity’. Foto: Manuel Cuéllar.

‘AFFINITY’ es una instalación interactiva e inmersiva que se inspira en los complejos mecanismos del cerebro humano. Cada esfera de luz simboliza un recuerdo, esperando ser despertado. A medida que los visitantes se acercan a AFFINITY, son recibidos por una sinfonía de recuerdos, cada uno activado por su proximidad. Al tocar una esfera, se enciende una luz correspondiente, iniciando un viaje visual.

Creada por: Amigo & Amigo. Instalada en Jardines de Falerina.

Fundada en 2012, Amigo&Amigo, con sede en Australia, se especializa en la creación de obras de arte interactivas. Ha sido destacados en más de 50 festivales de luz en todo el mundo. Amigo&Amigo produce arte que conecta con el público a través de narrativas significativas e interactividad física, con la intención de generar un momento trascendental de ligereza, alegría y juego.

'0'. Foto: Manuel Cuéllar.

‘O’. Foto: Manuel Cuéllar.

‘O’ es una instalación audiovisual que explora la transformación del espacio a través de la luz, el color y el sonido. Con un diseño minimalista, su pieza central es un marco con forma de ojo iluminado por haces de luz teñida, que crean atmósferas etéreas. La obra guía a los espectadores hacia un estado de calma y reflexión, alejándolos de las distracciones cotidianas.

Creada por: Tiler Gab. Instalada en el Palacio de Congresos Europa, Auditorio María de Maeztu.

Su trabajo tiene su origen en Barcelona, donde combina los elementos de espacio, luz y música para crear experiencias audiovisuales inmersivas, instalaciones y performances. Situado en la intersección de la arquitectura, la tecnología y las artes digitales, el enfoque de su práctica se centra en explorar la experiencia humana a través de la luz, el sonido y el lugar.

'Lux Domus'. Foto: Manuel Cuéllar.

‘Lux Domus’. Foto: Manuel Cuéllar.

‘LUX DOMUS’. El término en latín Domus designa el espacio doméstico: la casa, el hogar, un lugar donde la arquitectura es más arquitectura, porque la protección es mayor que en cualquier otro espacio. Este es el concepto principal de LUX DOMUS, una arquitectura de luz que busca ser un espacio de acogida, de silencio, de paseo tranquilo que invite a la reflexión, donde la transformación geométrica de la luz alterará nuestra percepción del entorno, creando una experiencia única. Expuesta en

Creada por: Josep Poblet. Instalada en la Catedral Nueva.

Tras estudiar economía y música, inicia su carrera como diseñador cuando decide dejar su trabajo en una oficina para volver a trabajar con las manos, tal y como hacía en su infancia. Influido por los oficios familiares –la tierra, las máquinas, el taller–, extrae de estos orígenes la percepción y el sentido de sus propuestas. Paralelamente, desde el inicio muestra un interés especial por la luz: por su materialidad, su capacidad para generar movimiento, su contraste y su papel en la definición del espacio y el vacío, entre otros.

'Antea Bakea Da'. Foto: Manuel Cuéllar.

‘Artea Bakea Da’. Foto: Manuel Cuéllar.

‘ARTEA BAKEA DA’. El lema ARTE ES PAZ guía esta edición del festival, un mensaje que refleja el poder del arte para generar armonía y conexión. Esta frase se exhibe en la fachada de Villa Suso, un emblemático espacio cultural de la ciudad que acoge congresos, exposiciones y eventos de relevancia.

Situado en el corazón de Vitoria, Villa Suso es un lugar de encuentro para la creatividad y la reflexión, y con esta instalación, la organización de Umbra quiere que el lema resuene en el centro de la ciudad, simbolizando la unión de la Cultura, el Arte y la Paz como principios fundamentales del festival.

'Dresses'. Foto: Manuel Cuéllar.

‘Dresses’. Foto: Manuel Cuéllar.

‘DRESSES’. Inspirado en El discurso del amante, de Roland Barthes, la instalación explora el deseo de fusionarse con un amante, simbolizado a través de vestidos extravagantes realizados con cientos de hilos de fibra óptica. Suspendidos en la oscuridad, los vestidos brillan y cambian de color, representando sus historias evolutivas de amor, intimidad y transformación.

Creada por: Tae Gon Kim. Instalada en el Palacio de Zulueta.

Gon Kim es un artista visual francés, graduado en la École Supérieure des Arts Décoratifs y la Universidad Marc-Bloch de Estrasburgo, así como en la Universidad de Seúl en Bellas Artes en 2001. Desde 1998, ha expuesto su obra en diversos países, obteniendo reconocimiento internacional.

'Parallel Strata'. Foto: Manuel Cuéllar.

‘Parallel Strata’. Foto: Manuel Cuéllar.

‘PARALLEL STRATA’ es una instalación cinética de luz y sonido creada por Nicky Assmann y Joris Strijbos, que presenta esculturas monumentales combinando luz estroboscópica giratoria con juegos de sombras. Esta experiencia audiovisual invita a explorar una interacción dinámica de luz y sonido, revelando estratos paralelos.

Creada por: Nicky Assmann y Joris Strijbos. Instalada en el Colegio Santa María-Marianistas.

El trabajo de estos artistas radicados en Rotterdam se inspira en la naturaleza, la ciencia, la tecnología y la percepción. Sus piezas colaborativas combinan arte cinético, cine expandido y experimentos perceptivos, creando experiencias multisensoriales a través de esculturas.

'Guerra y Paz'. Foto: Manuel Cuéllar.

‘Guerra y Paz’. Foto: Manuel Cuéllar.

‘GUERRA Y PAZ’ revive una de las fuentes-columna del escultor Girbau, cubriendo sus frentes con pantallas de vídeo. En ellas, además de generar distintos visuales que representan la creación (paz) y la destrucción (guerra), el público puede interactuar a través de un código QR y accionar distintos mensajes sobre guerra o paz que saldrán en las pantallas.

Creada por: Alejandra Bueno. Instalada en la plaza de Francisco Juan de Ayala.

Alejandra Bueno es una artista visual con una sólida trayectoria respaldada por premios, becas y su participación en destacados festivales. Entre los últimos reconocimientos se encuentran el Premio Caf Elhuyar o su participación en el Basque Artist Program Guggenheim NY. Especialista en imagen digital, videoarte y cine experimental, su obra se ha exhibido en museos y galerías de Europa y América, explorando temas como la identidad, la tecnología y la performatividad.

'Un Oiseau De Passage'. Foto: Manuel Cuéllar.

‘Un Oiseau De Passage’. Foto: Manuel Cuéllar.

‘UN OISEAU DE PASSAGE’. Representa un enorme pájaro mágico que emerge de la oscuridad, vuela, agita sus alas y desaparece. Cuenta la historia de un ave que atraviesa paisajes, cuyo viaje migratorio se ve alterado por la presencia humana. La obra está acompañada de una creación sonora espacializada que mezcla música, cantos y ruidos concretos.

Creada por LUMINARISTE. Instalada en el paseo de Fray Francisco de Vitoria.

Su historia comienza con Benjamin Nesme (diseñador de luz y artista del vidrio emplomado). Fundó Luminariste con el objetivo de combinar diferentes aplicaciones de la luz: espectáculo y arquitectura, artesanía y digital, colaborando con los especialistas más adecuados para cada proyecto. Un encuentro clave con Marc Sicard (ilustrador y diseñador) cristalizó el deseo de contar historias personalizadas para los espacios públicos.

'Artaraxie'. Foto Manuel Cuéllar.

‘Ataraxie’. Foto Manuel Cuéllar.

‘ATARAXIE’ significa “tranquilidad mental”. En esta nueva instalación, el artista Maxime Houot se cuestiona qué podría significar este estado en un mundo post-pandemia, cambiado y aún en evolución. Una fila de láseres llena el espacio con haces de luz roja, que inicialmente forman simples cruces antes de evolucionar hacia geométricas estructuras de gran complejidad.

Creada por: Collectif Coin. Instalada en el Palacio de Congresos Europa, Sala Green Capital.

Collectif Coin es un laboratorio de arte con sede en Grenoble, Francia, que se dedica a la producción de performances monumentales e instalaciones íntimas. Conocido por su compromiso con la creación de obras trans-disciplinares, el colectivo pone especial énfasis en las artes digitales. Al explorar la interacción entre el cuerpo, el sonido y la luz, Collectif Coin crea experiencias inmersivas y provocadoras que invitan al público a reconsiderar sus percepciones sensoriales.

'Echo'. Foto: Manuel Cuéllar.

‘Echo’. Foto: Manuel Cuéllar.

‘ECHO’ hace referencia a su creación audiovisual, donde cada sonido y elemento de iluminación LED entablan un diálogo dinámico, respondiendo entre sí para crear un ballet infinito de movimiento y luz. La forma comienza como termina, perpetuamente reflejada a través de reverberaciones auditivas y visuales, invitando al espectador a un bucle de exploración sensorial.

Creada por Julien Menzel. Instalada en Parque El Prado.

Julien es un artista franco-alemán que estudió Arquitectura y está profundamente influenciado por la rica herencia cultural de su ciudad natal, Lyon, famosa por su Fête des Lumières (Fiesta de las Luces). Su enfoque artístico gira en torno a la luz, los píxeles y el arte óptico, explorando la dinámica interacción entre estos elementos.

Más información aquí

Deja tu comentario

¿Qué hacemos con tus datos?

En elasombrario.com le pedimos su nombre y correo electrónico (no publicamos el correo electrónico) para identificarlo entre el resto de las personas que comentan en el blog.

No hay comentarios

Te pedimos tu nombre y email para poder enviarte nuestro newsletter o boletín de noticias y novedades de manera personalizada.

Solo usamos tu email para enviarte el newsletter y lo hacemos mediante MailChimp.