El Botánico de Madrid, aún más accesible con su ‘guía de los sentidos’
Algunas de las primeras visitantes del recorrido ‘El Jardín Accesible’, del Botánico de Madrid. Foto: Diego Lara.
El Real Jardín Botánico (RJB) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) acaba de presentar su primer itinerario adaptado, diseñado para que cualquier visitante, con independencia de sus capacidades cognitivas, recorra los espacios más emblemáticos de este centro investigador y divulgativo. El nuevo recorrido se denomina ‘El Jardín a través de los sentidos’ .
Este nuevo itinerario está incluido dentro del proyecto El Jardín accesible, que cuenta con la colaboración de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), del Ministerio de Ciencia e Innovación. Lo presentaron la semana pasada, en una soleada mañana en que el Jardín se mostraba radiante con las lluvias caídas en las tormentas que visitan Madrid casi a diario desde finales de mayo. El jardín nos recibía verde y cuidado para dar este nuevo paso para convertirse realmente en el Jardín de todos, cada vez más dinámico.
El Jardín de los sentidos cuenta con siete paneles informativos con textos en lectura fácil que invitan al visitante a observar e interactuar con las plantas y su entorno, no sólo a mirarlas –aunque también, de hecho, se señalizan los puntos con “las vistas más bonitas”–, sino también a olerlas y tocarlas, e incluso aplicar el sentido del oído, por ejemplo escuchando el croar de las ranas en la charca –pletórica estos días– del fondo del Jardín.
La sencilla ruta, pensada para personas que pueden cansarse y desconectar la atención fácilmente, propone siete paradas: la zona de ornamentales y la de aromáticas, en la rosaleda, el huerto (uno de los espacios del Botánico que más les llama la atención, por lo familiares que les resultan las plantas, desde las calabazas y la enorme variedad de pimientos, a las gigantescas plantas de las alcachofas), el estanque de las plantas acuáticas y el invernadero, además del recorrido por un pequeño “jardín sensorial” en el que tocar, oler y percibir los elementos propios de un jardín, descubriendo texturas y aromas en hojas, maderas, tierras y frutos: “Tocad, tocad, veréis que estas hojas parecen las orejas de un peluche”, anima la guía. “Y tocad esta planta y oled luego la mano, ¿a que os recuerda a las chocolatinas con menta?”. Mientras, dos mujeres están embelesadas con los nenúfares y comentan que son las flores favoritas de la abeja Maya.
“Uno de los valores añadidos de este itinerario es que, en el proceso de creación, diseño y desarrollo, el equipo educativo del RJB ha trabajado en colaboración con un equipo de profesionales con discapacidad intelectual de Plena Inclusión Madrid, que han sido los encargados de supervisar y validar todo el proceso”, señala la jefa de la Unidad de Cultura Científica y coordinadora del proyecto El Jardín accesible, Irene Fernández de Tejada de Garay.
La vicedirectora de Jardín y Cultura Científica, Ricarda Riina, destacó en la presentación la pasada semana: “Este nuevo itinerario es una demostración efectiva del trabajo que se viene realizando en los últimos tiempos por hacer del Real Jardín Botánico un espacio inclusivo y accesible a todas las personas”.
Y el director de Plena Inclusión Madrid, Javier Luengo, destacó la involucración del Botánico con la accesibilidad cognitiva y con las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo, y puso en valor “que se trata de un proyecto global, ya que se han adaptado contenidos a lectura fácil, ha diseñado un plano comprensible y ha formado a los profesionales del Jardín”.
La guía en lectura fácil explica, por ejemplo, así los invernaderos: “Los invernaderos son edificios que utilizamos para cultivar plantas de interior. Las plantas de interior son las que no pueden crecer al aire libre. El edificio tiene paredes y techo de cristal para que entre la luz del sol. Dentro del invernadero sentirás mucha humedad. Eso es por el vapor del agua. Calentamos agua con paneles solares para que haya humedad dentro del invernadero. El agua va por un canal de agua debajo del invernadero. Podemos ajustar la humedad según lo que necesiten las plantas. En los invernaderos del Jardín hay plantas de países con un clima muy diferente al de Madrid”.
El Botánico a través de los sentidos. Foto: Diego Lara.
Guía y plano accesibles
Este itinerario se puede visitar de forma libre, con una guía y un plano cognitivamente accesibles disponibles en la web o a través de visitas guiadas que son dinamizadas por el equipo educativo del Jardín Botánico. Además, en la taquilla del RJB, y de forma gratuita, estará disponible la versión en papel de la guía para aquellas personas que la soliciten con su entrada de acceso al Jardín. El nuevo itinerario ha sido probado durante las últimas semanas por distintos colectivos sociales.
Explican los portavoces del Botánico: “Esta acción se enmarca dentro de El Jardín accesible, un proyecto de inclusión y accesibilidad que persigue abrir este espacio de estudio, conservación y divulgación de la botánica a colectivos desfavorecidos y habitualmente excluidos de las acciones educativas, facilitando su participación de forma inclusiva. El objetivo es ir ampliando los recursos de accesibilidad e inclusión del Real Jardín Botánico-CSIC en los próximos años, consiguiendo atraer el mayor número de visitantes y amantes de las plantas con independencia de sus capacidades y dificultades físicas y/o psíquicas”.
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