Una mujer, sencillamente: a punto de llorar o a punto de sonreír

Foto: Victoria Iglesias.

Foto: Victoria Iglesias.

Llevo viendo a esta mujer tantos años que en ocasiones llega a ser mi propio espejo. He dejado tantas miradas sobre ella que ahora, ya convertida en Gioconda, a veces me las devuelve amargas o dulces. A punto de llorar o a punto de sonreír. Siempre en el filo de una realidad que se llena de veladuras para surgir de nuevo pulida, con otro tono, un día más, un mes más, otro año…

Otras tantas veces me pregunto quién es o quién será.

A punto de llorar o a punto de sonreír.

Me ronda por la cabeza su imagen con el cuenco de arroz en la mano a plena luz del día, o a oscuras tentando la noche. Un arroz que lleva pegado a sus dedos una eternidad que paran el tiempo en la selva Lacandona, que alimentan, que avivan el fuego, que amamantan, que limpian, que lavan, que trabajan, que acarician, que atan que desatan que soportan…

Como puedo elegir, la imagino fuerte y dura; pero la realidad no sé en quién la habrán convertido. Sus ojos no han envejecido, soportan una edad perenne sin tiempo que vaya cayendo y vaya descontando. Sin aguja que arrastre segundos infinitos. Sin compás que marque lo inevitable. Ella es la de todos los días con la única cultura de sus propios genes, que le muestran la supervivencia, la básica ley que le exige estar viva.

De un lado:

Chiapas 1998. Mujer. Edad indeterminada. Nombre desconocido. Indígena chol. Refugiada Zapatista. Sin caparazón. Luchadora. Madre. Hija.

Del otro:

Madrid 2019. Mujer. Edad indeterminada (porque aun siendo mayor desconoce en que año anda su espíritu). Nombre, Victoria Iglesias. Refugiada bajo un cascarón. Luchadora cuando me obligo a salir y me vengo arriba. Madre. Hija.

Dos mujeres a punto de llorar o a punto de sonreír.

Deja tu comentario

¿Qué hacemos con tus datos?

En elasombrario.com le pedimos su nombre y correo electrónico (no publicamos el correo electrónico) para identificarlo entre el resto de las personas que comentan en el blog.

No hay comentarios

Te pedimos tu nombre y email para poder enviarte nuestro newsletter o boletín de noticias y novedades de manera personalizada.

Solo usamos tu email para enviarte el newsletter y lo hacemos mediante MailChimp.