¿ Ríen los perros y gatos ? Lo que hay detrás del humor peludo
Perros y gatos nos hacen reír todo el tiempo. Pero, atención, porque viene una pregunta peluda y peliaguda: ¿Perros y gatos también ríen? ¿Es una sonrisa eso que se dibuja en la cara de canes y felinos felices y que tantos reconocemos como una sonrisa? Y una vuelta de tuerca más: ¿Tienen gatos y perros su propio sentido del humor? Te explicamos cómo ríen y sonríen perros y gatos, por qué la felicidad peluda es tan contagiosa y cómo canes y felinos tienen un cómico peludo dentro y han aprendido incluso a hacernos reír.
¡Risas perrunas que nos hacen felices!
Muchos somos los que creemos que perros y gatos sonríen. Y puede que no estemos tan equivocados, dicen los científicos. El primero en rendirse ante los encantos de la sonrisa perruna fue el premio Nobel de Medicina Konrad Lorenz. El científico describió la risa canina en Hombre conoce perro (Man Meets Dog, Routledge, 2002). Konrad decía que «al sonreír, el perro abre de forma ligera sus fauces y enseña un poco su lengua».
No mires ahora, pero ¿es eso un perro que ríe a carcajada peluda limpia? La risa perruna reclama la atención de muchos investigadores, entre ellos, de la experta en comportamiento canino Patricia Simonet. La etóloga quería saber si el sonido parecido a un hhuh hhuh que emitía su perro mientras echaba la cabeza hacia detrás era una risa perruna. Y, animada por la primatóloga inglesa Jane Goodall, recorrió los parques caninos armada con potentes micrófonos para encontrar su respuesta. Su misión peluda: identificar cómo ríen los perros que juegan y lo pasan bien.
«Cuando el can juega emite un característico sonido entrecortado como de hhuh, hhuh, un jadeo que puede identificarse como la risa de un perro feliz», concluye Simonet. Pero hay más: la risa perruna, como sospechabas, es contagiosa. ¡Y dispara reacciones felices en otros canes! Esto explica por qué el sonido grabado de las carcajadas perrunas se usa en centros de adopción: los perros que esperan una familia se relajan, dejan de ladrar y hasta juegan cuando escuchan sonidos de otros canes que ríen.
Gatos que sonríen, ¡a su peludo modo!
Los gatos nos dicen que son felices de muchos modos: las orejas hacia delante y hacia arriba son una buena señal. Un rabo gatuno erguido como la antena de un theremín es la forma felina de decir: «Hola humano, quiero ser tu amigo, purrrrr». Y si además las pupilas del gato tienen la forma alargada, como de una ranura, tu minino probablemente está contento.
A las personas, sin embargo, nos encantan las fotos de gatos que parecen sonreír, con lo que identificamos como una risa casi humana. Gatos que posan felices con su pajarita en Instagram y mininos que sestean con una risita en la boca. «Sin embargo, esto no es una sonrisa, ya que los gatos, al contrario que los humanos, no han desarrollado expresiones faciales sofisticadas», explica Nicky Trevorrow, experta en comportamiento felino de la asociación gatuna Cats Protection.
Los felinos han evolucionado para no mostrar sus emociones abiertamente con el fin de sobrevivir. Pero eso no significa que no haya un equivalente gatuno de la sonrisa humana. Los expresivos ojos del gato tienen la llave de la felicidad peluda: «El suave parpadeo de un gato es la forma más clara de saber que el minino es feliz y quiere ser nuestro amigo», dice esta veterinaria.
Si la risa perruna es un hhuh hhuh en el jadeo, ¿hay también una versión sonora de carcajada gatuna? Algunos científicos creen que ciertos ronroneos pueden ser considerados una discreta risa felina. «Si hay ronroneos relacionados con el placer felino y la liberación de químicos placenteros a su cerebro, es razonable pensar que estos ronroneos puedan ser una versión de la risa felina», asegura el psiquiatra Jeffrey Burgdorf, que lleva años estudiando las señales de la felicidad en distintos animales.
Humor perruno y gatuno: ¿nos hacen reír a propósito?
Las risas falsas son lo peor. Y también son todo lo contrario de las carcajadas que nos arrancan gatos y perros cada día. No pretendes reírte cuando tu amigo perruno espera a que le lances la pelota y abre los ojos de par en par mientras que agita su rabo cada vez a mayor velocidad: sencillamente ocurre. Tampoco cuando el gato te acompaña al baño y se cuela en tu ropa interior: ¡la risa es inevitable y honesta!
Entonces, ¿cómo estamos tan seguros de que perros y gatos no han aprendido a hacernos reír, y que incluso tienen su propio sentido cómico? Marc Bekoff, autor de El Manifiesto Animal (2010) y La vida emocional de los animales (2008), está convencido de que el sentido del humor animal existe, y que este puede estar más generalizado de lo que creemos.
La idea de que perros y gatos aprecian las situaciones cómicas y que son capaces incluso de crearlas no parece entonces tan descabellada. «Si nosotros tenemos sentido del humor, no hay duda de que los animales no humanos también deben de tener su propio sentido del humor», zanja Bekoff.
Ya lo sabes: la próxima vez que sorprendas al perro colocando su juguete favorito en tus pies mientras trabajas o a tu gato saltando de cabeza dentro de una caja de cartón, no descartes que lo hace a propósito para reírse de puro placer peludo y para ver contento a su compañero humano.
Comentarios
Por Tobias Diaz, el 07 febrero 2017
Me encanta… pero poned un enlace o algún audio de esa carcajada perruna porque «hhuh, hhuh» es una descripción demasiado vaga (al menos para mí). Gracias!
Por Reyes, el 07 febrero 2017
Como siempre artículo maravilloso por su contenido y calor
Por MiMiga, el 08 febrero 2017
Si no interpretáramos todo desde un punto de vista antropocentrista nos sería mucho más fácil entender a nuestros compañeros animales. Son seres maravillosos y debemos aprender a SU forma de comunicación (no verbal), no «humanizarlos».
Por cierto, los gatos sí muestran sus estado emocional, con todo el cuerpo y es precisamente con el fin de sobrevivir – visible desde lejos para evitar un acercamiento (en caso de desconocidos) que pueda terminar en una posible pelea.
Y estamos de acuerdo con Bekoff. Mucha gente comente, que cuando están tristes o tensos, sus animales hace cosas para hacerles reír a propósito.
Un saludo.