Siete joyas de películas que acaban de pasar a dominio público

Fotograma de ‘Metrópolis’, de Fritz Lang.

La primera película en ganar el Oscar a la mejor película (‘Alas’), el primer filme de suspense de Alfred Hitchcock (‘El inquilino’), la primera película hablada de la historia del cine (‘El cantor del jazz’) y la obra maestra de Fritz Lang (‘Metrópolis) han pasado este año, junto a otros filmes, a ser de dominio público; es decir, que sobre ellos no pesa ya la protección de los derechos de propiedad intelectual y, por tanto, pueden difundirse libremente. Repasamos estas y otras películas conocidas que son ya de uso común.

Cada año se liberan filmes, libros, canciones, grabaciones… A medida que van caducando los derechos de autor, según la legislación de cada país, estas obras pierden el veto para compartirse y reproducirse sin trabas. En el ámbito anglosajón, el Centro para los Estudios del Dominio Público de la Facultad de Derecho de la Universidad de Duke en Estados Unidos, fundado en 2002, compila cada año en varias listas las obras de creación que pasan a dominio público. La lista de películas que difundió el pasado enero la componen 13 filmes estadounidenses e ingleses, una selección pequeña de aquellos estrenados en 1927, que este año de 2023, de acuerdo con sus leyes, adquieren la condición de dominio público.

Aunque aquí nos enfoquemos en el cine, señalaremos que, entre los libros que el centro de la Universidad de Duke anunció como libres de derechos de autor se encuentran la colección de cuentos de Arthur Conan Doyle El archivo de Sherlock Holmes; Al faro, de Virginia Woolf, y Hombres sin hombres, una colección de relatos de Ernest Hemingway, naturalmente en su versión original.

En España, la Biblioteca Nacional publicó su propia lista de 177 autores, entre los que sobresale el poeta Miguel Hernández, algunos de cuyos libros pueden leerse en el portal de la Biblioteca Digital Hispánica. Aquí, el plazo de protección intelectual caduca a los 80 años de la muerte del autor. En el caso de las películas que reseñamos a continuación se refiere a copias que no han sido modificadas desde su estreno hace casi un siglo, y no a aquellas que incluyen añadidos de imágenes halladas posteriormente o sobre las que se hayan compuesto bandas sonoras.

‘Metrópolis’. Fritz Lang

En un viaje a Estados Unidos a mediados de los años 20 para conocer sus métodos de producción cinematográficos, a Fritz Lang y su esposa y guionista, Thea Von Harbour, les deslumbró Nueva York. La arquitectura rampante de sus rascacielos, las inmensas masas que discurrían por sus calles, el aturdimiento que provocaba su energía aparecerían duplicados en las imágenes de Metrópolis, una fantasía futurista sobre una sociedad dividida entre amos y esclavos, que iba a cumplirse poco después en la propia Alemania con el asalto del nazismo al poder. Como otras de las más relevantes películas estrenadas aquel año, la enormidad de su presupuesto, que desembolsó con pocas dudas el principal estudio alemán, Ufa, reflejaba la confianza ciega en el cine, en su poder de atracción. Con miles de extras, decorados desmesurados, un metraje que superaba largamente las dos horas, Metrópolis fue una contestación artística a Hollywood, aunque la magra recaudación que obtuvo estuvo a punto de hacer naufragar al estudio.

‘Metrópolis’. Enlace para su visión gratuita en Plex TV

El cantor de jazz’. Alan Crosland

Una cara que hoy sería censurada por racista, la de un hombre blanco tiznado simulando pasar por un hombre negro, se exhibía en uno de los carteles de El cantor de jazz, el filme que anunciaba la llegada del sonido al cine. En 1926, un año antes, en la precursora Don Juan, los técnicos habían logrado incluir una banda sonora, pero no aún la palabra hablada, un hito que correspondería al filme de Alan Crosland. La película era una adaptación de una obra de teatro, un melodrama sobre un hombre de religión judía, al que encarnaba el actor pintado, Al Jolson, que renuncia a seguir los pasos de su padre rabino para convertirse en cantante de jazz. La innovación del filme fue meramente técnica, de modo que su valor hoy es histórico, un documento sobre el tránsito de un modo de entender estéticamente el cine a otro.

‘El cantante de jazz’. Enlace para su visión gratuita. en YouTube

Amanecer’. Friedrich Wilhelm Murnau

La primera película que el director alemán Friedrich Wilhelm Murnau dirigió en Estados Unidos fue una parábola de la vida arcádica que confrontaba el paraíso rural con la corrupta urbe. A diferencia de Lang, Murnau había abandonado Alemania no por motivos políticos, sino atraído por uno de los megalómanos productores de Hollywood, William Fox. Con un presupuesto ilimitado, Murnau derrochó a conciencia el dinero que puso en sus manos Fox, lo que convirtió su película en la más cara rodada hasta entonces. Amanecer sigue la peripecia de un matrimonio de granjeros, cuya vida interrumpe una mujer proveniente de la ciudad, uno de esos modelos de mujeres fatales que Hollywood instituyó como canon femenino. El marido queda atrapado en un juego de seducción por este personaje fatídico, que le convence para que mate a su esposa. Liberado de ella, los amantes prevén huir a la ciudad. Sobre esta trama melodramática, Murnau construyó unas imágenes poéticas, sublimadas. A ellas les aplicó, como recuerda Martin Scorsese en Un recorrido personal por el cine americano, una concepción de la cámara como “el pincel descriptor de un director”. Para Murnau, la cámara “debería ser lo más móvil posible para captar todo movimiento fugaz. Debe girar, espiar y moverse de un lugar a otro tan rápidamente como el pensamiento”. Amanecer sería el pensamiento imaginado de su director.

‘Amanecer’. Enlace para su visión gratuíta en Pluto TV

El inquilino’. Alfred Hitchcock

Alfred Hitchcock consideraba El inquilino como su primera película, aunque fuera la tercera que rodó, según recuerda su biógrafo Donald Spoto. “Fue la primera vez que pude aplicar mi propio estilo”, dijo el director de Con la muerte en los talones. Ese estilo que construye con el movimiento de la cámara, con los insertos de detalles, con un montaje del suspense. Aunque la historia esté emparentada vagamente con los asesinatos de Jack el Destripador, Spoto apunta a El gabinete del doctor Caligari como la fuente visual fundamental del filme. Aparece aquí, además, la fijación del cineasta por las rubias, víctimas de un asesino en serie que las busca en un Londres neblinoso, aunque el centro de la película narra la relación entre el inquilino de una habitación alquilada a un matrimonio y la hija de este. En una secuencia al principio de la película, en la redacción de un periódico donde se prepara la edición del día con información sobre el séptimo de los crímenes cometidos por el asesino, la imagen toma por detrás a un hombre que habla por teléfono. Ese hombre es Hitchcock, en el primer cameo de su larga filmografía.

‘El inquilino’.  Enlace para su visión gratuita en Plex TV

Rey de reyes’. Cecil B. DeMille

La Biblia dio dividendos copiosos al cine mudo. En un mundo católico, las producciones de Hollywood, pero también europeas (la directora francesa Alice Guy filmó en 1904 La vida de Cristo, y en Italia el conde Giuseppe de Liguoro y Giulio Antamoro rodaron Cristo en 1915), propagaron en la ficción el adoctrinamiento que la Iglesia venía dispensando en las aulas hacía siglos. Asesores, consejeros, consultores de la jerarquía católica supervisaron y dieron el nihil obstat a estos filmes traídos a su causa religiosa. Grandes relatos para grandes películas (por sus dimensiones, no tanto por sus valores artísticos). Cecil B. DeMille fue en Hollywood el principal divulgador de la fe católica con sus dos versiones de Los diez mandamientos (una muda en 1928 y la más conocida con Charlton Heston en 1956) y Rey de Reyes, uno de sus fastuosos espectáculos, que recrea la vida de Cristo con todos los medios de la industria a su alcance. Aunque rodada en blanco y negro, su sorprendente y poco católica secuencia inicial está filmada en color: muestra a la pecadora, erótica, María Magdalena rodeada de hombres ricos que la retan a seducir a un carpintero de Nazaret al que acompaña un grupo de mendigos.

‘Rey de reyes’. Enlace para su visión gratuita. en archive.org

El hermanito’. Ted Wilde

Hasta tres directores tuvieron entre sus manos El hermanito; pero como en los filmes de Chaplin o Keaton, el creador era su protagonista, el tercer pilar del trío cómico más imperecedero del mudo: Harold Lloyd. Él discurría, planificaba, inventaba los gags… que le sugería el argumento. Aunque El hermanito reescribe en clave cómica una película anterior, Tol’able David, que dirigió Henry King en 1921, enseguida se aprecia que su inspiración es el cuento de la Cenicienta; pero en lugar de un mundo de ensueño y fantasía, el escenario es el Oeste americano. Rompiendo los códigos del western, en una decisión arriesgada para un género reacio a la comicidad, Lloyd interpreta al menor de tres hermanos hijos de un sheriff que abusan de él por torpe y aparentemente cobarde. Como en Woody Allen, las proezas de Lloyd (como amante, como héroe) representan una burla de la heroicidad masculina.

‘El hermanito’. Enlace para su visión gratuita en archive.org

Alas’. William Wellman

No hubo sorpresas cuando Alas recibió el primer Oscar de la historia a la mejor película. Se había anunciado públicamente meses antes. Debió resultarle a medias doloroso y emotivo a su director, William Wellman, enfrentarse en la ficción a recuerdos no muy lejanos de sus vivencias en la I Guerra Mundial como piloto de aviones. Era su primera gran película después de doce filmes que apenas llegaban a la hora de duración. De modo que, aunque al principio la Paramount no contó con él para dirigir Alas, su elección resultó acertada. Wellman concibió técnicas de rodaje de los combates que aún hoy siguen sorprendiendo, como la instalación de cámaras en los aviones, que magnifican la dimensión de superproducción del filme. Su historia, la de la relación entre dos pilotos y una mujer que se quiebra cuando ellos son enviados a combatir en Europa, contiene esa mezcla de lo íntimo y gran espectáculo que inventó Hollywood.

‘Alas’ Enlace para su visión gratuita en Youtube

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