José Manuel Ballester en las montañas de ‘Avatar’
Nunca antes las había enseñado. El premio nacional de grabado y fotografía José Manuel Ballester es un enamorado de China y allí visitó el parque natural de Zhangjiajie en el que están Las columnas del cielo, las montañas reales que rodó James Cameron en su película ‘Avatar’. Un lugar de asombrosa belleza vista a través del objetivo de uno de los mejores fotógrafos de España. Cada una de las imágenes permite verse en tamaño completo, cosa que recomendamos.
El artista José Manuel Ballester, premio nacional de Grabado y premio nacional de Fotografía, nos regala una obsesión y una novedad, envueltas en el mismo paquete: Paisajes de China. Desde hace un lustro, Ballester viaja a menudo al gigante asiático y algunas de sus mejores obras han salido últimamente de allí. Desde hace un año, ha retomado el paisaje como motivo inspirador para sus fotografías de gran formato, algo que estuvo muy presente en los primeros pasos de su trayectoria artística como dibujante (cómo olvidar sus trazos de las Tablas de Daimiel). Sin embargo, después prefirió enormes arquitecturas, paisajes industriales y grandes obras de infraestructuras, aunque su alma es ecológica y le duelen más que a nadie las amenazas al planeta y el destrozo del patrimonio natural.
Ya pudieron contemplarse algunos de sus paisajes -de Asia, de Castilla, de Brasil- en la exposición que montó hace un año en Tabacalera, en Madrid. Ahora, nos sorprende con estas majestuosas montañas de China, donde James Cameron rodó el bombazo cinematográfico Avatar (2009), que contó con un presupuesto de unos 400 millones de dólares (incluido marketing) y que está catalogada como la película que ha conseguido mayor recaudación en taquilla en menos tiempo. Las esculturas/montañas están situadas en el parque natural de Zhangjiajie, en la provincia de Hunan; tan espectacular son estas columnas donde la erosión de millones de años ha elevado la tierra hacia el cielo, que fue el primer parque protegido por el Gobierno chino en 1982; diez años después, la Unesco también lo acogió bajo su paraguas de Patrimonio de la Humanidad.
Ballester estuvo allí este mismo año, en septiembre, y se quedó maravillado con la magnitud, la escala del prodigio. Hizo lo que mejor sabe hacer cuando algo le emociona: fotografiarlo. Para traérselo, mostrarlo, atesorarlo. Y aquí están estas cinco fotos inéditas, que aún no ha mostrado a nadie. Ballester en las Columnas del Cielo en Hunan. En las Montañas Flotantes de Pandora. Con todo el mensaje ecológico de identificación con la naturaleza que registra la película de Cameron a través del pueblo ficticio de los Na´vi, y que también ha modelado la poesía y la filosofía de la historia de China, aunque últimamente sus gobiernos son más conocidos por su agresión que por su veneración al medio ambiente. Ballester cree que el modelo está cambiando, y que ya incluso adoptan patrones occidentales de protección de parajes a través de figuras como las de parque natural.
José Manuel Ballester está ahora mismo presente en la exposición sobre ausencias de la colección permanente del Guggenheim de Bilbao; ultima su trabajo sobre Asturias con el apoyo de la Fundación María Cristina Masaveu Peterson, que se presentará en Gijón la próxima semana (40 obras seleccionadas de las miles de imágenes que ha tomado durante cuatro años); y prepara su participación en el homenaje a El Greco que se abrirá al público en febrero en Toledo, para conmemorar el cuarto centenario de la muerte del pintor, en un proyecto de IvoryPress y la Fundación El Greco 2014, con comisariado de Elena Foster Ochoa.
Ballester también publicó en El Asombrario una serie de fotos de sus teatros favoritos en el mundo a la que, además, les puso banda sonora.
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